Jaime Reusche, vicepresidente del Grupo de Riesgo Soberano de Moody’s, mencionó hace un mes que veía difícil que -en el contexto actual- el Perú mantenga su calificación, y así fue. La calificación crediticia de los bonos soberanos del Perú que realiza la agencia Moody’s Investors Service ya no es A3, sino que ahora es Baa1, con perspectiva estable.

La rebaja de A3 a Baa1 refleja la opinión de Moody’s de que un entorno político continuamente polarizado y fracturado ha aumentado el riesgo político y ha debilitado materialmente la capacidad de formulación de políticas. Estas condiciones han afectado negativamente la confianza de los inversores y han socavado la resistencia económica de Perú, lo que ha afectado negativamente las perspectivas crediticias de Perú a mediano plazo”, refiere la calificadora de riesgo.

Con esa calificación, Perú mantiene el grado de inversión, pero está a tres peldaños de perderlo. Esta es la primera rebaja que tiene el país en más de 20 años, desde las primeras calificaciones que recibía en 1999, para las deudas en moneda extranjera.

-¿Por qué se da la rebaja?-

Moody’s refiere que un entorno político cada vez más polarizado y fracturado ha socavado la eficacia de la formulación de políticas, lo que ha llevado a un deterioro progresivo de la fortaleza institucional del Perú.

Sostiene que más recientemente, la percepción de “falta de claridad sobre las políticas de la nueva administración, los controvertidos nombramientos del gabinete, las tensiones entre los poderes Ejecutivo y Legislativo y las crecientes tensiones dentro del partido gobernante han subrayado varios riesgos para la gobernabilidad general, la efectividad de las políticas y la credibilidad”.

Al respecto, para el exministro de Economía, Alonso Segura, era previsible una calificación que nos saque de la zona “A” al Perú, la que nos ponía en mejores condiciones frente a los inversionistas. Se esperaría -agregó- que con esta nota la tasa de interés se eleve algunos puntos básicos en deudas de largo plazo.

-Perspectiva estable-

A pesar de la rebaja en la calificación, la perspectiva pasó de negativa a estable. ¿A qué responde? La perspectiva estable refleja la opinión de Moody’s de que la resistencia económica de Perú está alineada con sus pares y que el soberano conserva un alto grado de fortaleza fiscal.

Aunque es probable que la inestabilidad política se mantenga alta, la calificación actual captura el deterioro anticipado en la posición económica y fiscal, siempre que las políticas sigan siendo consistentes con la senda de consolidación fiscal propuesta por las autoridades”, remarcó la agencia calificadora.

Esta perspectiva asume que el modelo económico y las instituciones fiscales y monetarias bien establecidas se mantendrán en su lugar. Las discusiones que conduzcan a una reestructuración constitucional -señala Moody’s- podrían plantear riesgos importantes para el perfil crediticio soberano.

-Escenarios-

¿Qué podría hacer subir o bajar la calificación? Moody’s explica que aunque es poco probable en un futuro próximo, un entorno político más armonioso que refuerce la cohesión institucional y dé como resultado la adopción de reformas sostenibles que fomenten el crecimiento al tiempo que respalde un clima de inversión mejorado podría conducir a una mejora en la calificación.

Contrariamente -detalla- un desempeño económico sustancialmente más débil junto con desviaciones de la trayectoria fiscal asumidas en las proyecciones de referencia de Moody’s podrían llevar a una rebaja porque pondría en peligro la capacidad del Gobierno para estabilizar las métricas de deuda.

Además, los cambios institucionales que conducen a cambios abruptos de política, socavan la efectividad de la política o fomentan la inseguridad jurídica debilitarían los cimientos estructurales del perfil crediticio del Perú.