La italiana UniCredit y la francesa BNP Paribas tranquilizaron a los ansiosos inversores sobre sus respectivas exposiciones a Rusia, pese a detallar miles de millones de euros en costos potenciales por las ondas financieras generadas por la invasión de Ucrania por parte de Moscú.
Bancos, aseguradoras y gestores de activos se han apresurado a distanciarse de Rusia y a evaluar sus exposiciones después de que Moscú recibiera fuertes sanciones de Occidente a raíz de la invasión de su vecino, que comenzó el mes pasado.
UniCredit dijo a última hora del martes que la cancelación total de su negocio en Rusia costaría unos 7,400 millones de euros (US$ 8,100 millones), lo que ensombrece los planes de distribución de capital del segundo banco más grande de Italia.
Por su parte, BNP Paribas dijo que su exposición total a Rusia y Ucrania asciende a unos 3,000 millones de euros (US$ 3,300 millones), lo que, según dijo, es relativamente limitado, y se ciñó a sus objetivos financieros para el 2025 previamente anunciados.
Las acciones de las principales firmas financieras europeas han caído bruscamente desde la invasión rusa de Ucrania, ya que los inversores se asustaron por los vínculos de algunas de ellas con la fuertemente sancionada Rusia y se prepararon para una posible desaceleración económica más amplia.
UniCredit dijo que, en el peor de los casos, su ratio de capital se reduciría en dos puntos porcentuales, pero confirmó sus dividendos en efectivo y sus planes de recompra de acciones, tranquilizando a los inversores.
Las acciones de ambos bancos se dispararon más de un 9% en las primeras operaciones, y el índice STOXX más amplio de bancos europeos ganaba un 5% en el día, protagonizando un rebote parcial tras las recientes caídas.
El índice bancario europeo había perdido previamente más de una cuarta parte desde la invasión de Rusia el 24 de febrero, frente a una caída de sólo el 10% en el índice STOXX de referencia.