Los precios del aluminio se encaminaban a terminar la semana con un descenso de casi el 5%, ya que el temor a una rápida subida de las tasas de interés en Estados Unidos frenó las perspectivas de crecimiento económico y la demanda de metales, lo que también golpeaba al cobre.
Los mercados bursátiles caían, el rendimiento de los bonos estadounidenses a 10 años alcanzó su nivel más alto desde 2007 y el dólar se fortaleció, presionando a los metales al hacerlos más costosos para los compradores que usan otras divisas.
En China, el mayor consumidor de metales, el yuan cayó a su nivel más débil frente al dólar desde 2008.
El presidente de la Reserva Federal de Filadelfia, Patrick Harker, sugirió que el banco central “seguirá subiendo los tipos durante un tiempo” y los datos económicos de Estados Unidos mostraron una persistente rigidez del mercado.
El aluminio de referencia a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres bajaba un 0.6% a US$ 2,196 la tonelada a las 11:02 GMT y un 4.8% esta semana.
Los precios de este metal, utilizado en el embalaje, el transporte y la construcción, han caído un 45% desde el máximo alcanzado en marzo, debido a que los confinamientos por el COVID-19 en China y las rápidas subidas de las tasas de interés en Estados Unidos y otros países han debilitado la economía mundial.
Analistas de Goldman Sachs dijeron que “los impulsos al fortalecimiento del dólar -la debilidad del sector inmobiliario chino y de la industria europea- son también presiones negativas sobre la demanda final de metales”.
“Estos vientos en contra seguirán deprimiendo la rentabilidad de los precios de los metales básicos hasta que la Reserva Federal termine su ciclo de endurecimiento”, dijeron.
El cobre LME bajaba un 1% a US$ 7,487 la tonelada, el níquel perdía un 2% a US$ 21,745, el plomo retrocedía un 3% a US$ 1,91750 y el estaño caía un 3.7% a US$ 18,630.
El zinc se desmarcó de la tendencia y ganaba un 0.8% a US$ 2,987.50 la tonelada.
Con información de Reuters