El cartel de países productores de petróleo de la OPEP+ sostendrá este jueves su reunión mensual en un contexto que mezcla la persistencia del conflicto en Ucrania, con un alivio de los precios por el efecto de los confinamientos en China, lo que aminora la presión para aumentar el bombeo.
Los representantes de los 13 miembros de la Organización de países exportadores de petróleo (OPEP) y sus diez aliados, liderados por Rusia, se reúnen el jueves en una cita por videoconferencia para determinar si ajustan la producción.
Desde el inicio de la invasión lanzada por Rusia contra Ucrania el 24 de febrero, los precios subieron por los temores sobre la oferta debido a la posibilidad de un embargo sobre el crudo de ruso.
Esto aumenta la presión sobre este cartel para que alivie al mercado con un aumento de la producción.
Sin embargo, estos llamados no han tenido una acogida en la OPEP+ y varios analistas proyectan que el grupo va a adoptar un aumento marginal en torno a unos 400,000 barriles por día.
La estrategia de un aumento magro en la producción fue iniciada en mayo del 2021 en el contexto de una recuperación, tras los recortes drásticos adoptados para remontar el golpe que supuso la pandemia.
Desde el 31 de marzo cuando fue la última reunión mensual del grupo, los precios se mantuvieron estables, oscilando entre US$ 97 y US$ 115 en el caso del Brent del mar del Norte y entre US$ 92 y US$ 110 en el caso del WTI estadounidense.
Las recientes caídas de las cotizaciones se deben a “los temores a que los confinamientos por el coronavirus en China puedan frenar la demanda de petróleo”, explicó Carsten Fritsch, analista de Commerzbank.
China -que es el segundo mayor consumidor de crudo del mundo- enfrenta su peor brote de COVID desde el 2020 y ha adoptado drásticas medidas para frenar los contagios, como el confinamiento en Shanghái, donde cerca de 25 millones de personas están confinados desde hace un mes.