Los economistas están divididos sobre si el crecimiento más lento de los precios al consumidor en Estados Unidos en julio significa que la Reserva Federal podría suavizar su agresivo programa de aumento de tasas, haciendo que las alzas de 75 puntos básicos sean menos probables.
El índice de precios al consumidor aumentó un 8,5% respecto del año anterior, enfriándose desde el avance del 9.1% de junio, que fue el mayor en cuatro décadas, según mostraron los datos del Departamento del Trabajo el miércoles. Los precios se mantuvieron sin cambios con respecto al mes anterior.
Los mercados ahora están descontando la probabilidad de un aumento de 50 puntos básicos en setiembre, en lugar de uno de 75 puntos básicos, y menos de 100 puntos básicos de alzas durante las próximas dos reuniones.
El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) que establece las políticas del banco central, elevó en julio su tasa de referencia en tres cuartos de punto porcentual por segundo mes consecutivo para llevar la inflación de vuelta a su meta del 2%. La próxima reunión del FOMC se realizará el 20 y 21 de setiembre.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijo a los periodistas después de la decisión del 27 de julio que los funcionarios podrían aumentar las tasas en la misma magnitud en la próxima reunión, dependiendo de las cifras económicas hasta entonces, aunque el ritmo se desaceleraría en algún momento.
Los banqueros de la Fed que han hablado en los últimos días han rechazado efectivamente la narrativa de los mercados financieros sobre que los banqueros centrales prevén un cambio en la tendencia restrictiva en medio de la evidencia de un giro en la economía, y han dicho que llevar de regreso la inflación a la meta del 2% sigue siendo una prioridad.
El IPC subyacente, que excluye los componentes alimentarios y energéticos más volátiles, subió un 0.3% desde junio y un 5.9% con respecto al año anterior. Si bien esas cifras fueron mejores de lo esperado, es probable que los funcionarios de la Fed estén preocupados por lo lejos que están del objetivo de inflación del 2%.