La tercera caída diaria consecutiva del bitcóin llevó al activo digital a niveles vistos por última vez en febrero, en medio de amenazas como el drama político en Estados Unidos y señales de que los tokens incautados por el Gobierno alemán fueron transferidos a bolsas.
La mayor criptomoneda perdió hasta un 4.3% el jueves antes de reducir parte del descenso para cotizar con una caída del 3% por debajo de US$ 57,680 durante la mañana en Londres. Otros tokens más pequeños, como solana y dogecóin, también operaban en terreno negativo.
Los inversores de todo el mundo están barajando escenarios en caso de que el presidente Joe Biden, de 81 años, sucumba a los llamados a retirar su candidatura a la reelección. Una posibilidad es que surja un contendiente demócrata más fuerte para hacerle la vida más difícil al republicano Donald Trump, cuya agenda favorece a la industria de las criptomonedas.
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“La probabilidad de que un candidato demócrata más fuerte reemplace a Biden, que podría no estar a favor de las criptomonedas, es un factor”, dijo Richard Galvin, cofundador del fondo de cobertura Digital Asset Capital Management. “Una razón más importante en el corto plazo para la debilidad del bitcóin es el exceso desde Mt. Gox y las ventas gubernamentales”.
En los últimos días, los operadores han estado evaluando el riesgo de que los Gobiernos de Estados Unidos y Alemania se deshagan de bitcoines incautados. Según datos de Arkham Intelligence, una billetera asociada al Estado alemán transfirió el jueves tokens por unos US$75 millones a bolsas, la última de una serie de transferencias.
Por otra parte, los administradores de la fallida bolsa Mt. Gox están devolviendo por etapas a los acreedores una gran cantidad de bitcoines. Los especuladores no saben a ciencia cierta qué parte de los US$ 8,000 millones acabará vendiéndose.
Mineros en apuros
Los operadores de las computadoras que sustentan la cadena de bloques de bitcóin, y que consumen mucha energía, siguen absorbiendo el impacto financiero del llamado halving de abril, que redujo a la mitad los nuevos tokens que reciben por el trabajo que realizan. Una respuesta de estos mineros de bitcóin es vender parte de su inventario de tokens.
“El bitcóin sigue luchando contra la presión vendedora de los mineros”, escribió Noelle Acheson, autora del boletín Crypto Is Macro Now.
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El sentimiento podría cambiar rápidamente en el mercado de las criptomonedas, por ejemplo, si datos económicos más débiles en Estados Unidos alimentan apuestas a una política monetaria más flexible de la Reserva Federal. Las aprobaciones pendientes de fondos cotizados en bolsa en Estados Unidos que invierten en ether, el segundo mayor token, también podrían mejorar el ánimo.
La interpretación de los acontecimientos políticos estadounidenses también puede variar. Matt Hougan, director de inversiones de Bitwise Asset Management Inc., argumentó que la posible rotación en la cúpula de la candidatura demócrata es “más probable que no se establezca en un lugar mejorado para cripto”. Dijo que la actitud de Washington hacia los activos digitales había cambiado para mejor en el último año.
Los especuladores ahora examinan los gráficos de bitcóin para ver si los niveles técnicos que se siguen de cerca se mantienen o ceden. La criptomoneda acaba de cerrar por debajo de una aproximación a su precio promedio móvil de seis meses. Este tipo de rupturas presagian más pérdidas si la historia sirve de guía, según muestran los datos recopilados por Bloomberg.
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