El término teletrabajo se ha vuelto común en los últimos días. Pero esta palabra, que para muchos implica hacer las tareas laborales desde casa u otro punto ajeno a la oficina no siempre es posible, ya que depende mucho del tipo de actividades que el profesional realice.
Ante la coyuntura actual y viendo que las medidas dadas por el gobierno cambian o se endurecen día a día, con posibilidad de extenderse el plazo de aislamiento social, ¿se podrá continuar con el desarrollo del teletrabajo? José Torres-Llosa, socio de Amrop Perú comenta que todo parte del tipo de trabajo que se realice y del rubro al que pertenece la empresa.
“Hacer las mismas tareas que se hacen en la oficina no siempre es posible, depende del trabajo, la supervisión, autonomía, entre otros factores, porque hay empresas donde el sistema que se emplea para llevar a cabo sus operaciones es usado solo dentro de su oficina o en el lugar de trabajo, que puede ser vía una red local”, explicó.
De esta manera, si estas empresas quieren que se realice el mismo trabajo tendrían que dar la infraestructura necesaria, cosa que no es sencilla. “Por ejemplo, quien realiza la labor de emitir facturas electrónicas técnicamente lo puede hacer desde su casa, pero si el sistema con el que lo realiza se ubica en la compañía requiere un acceso a través de internet y las facilidades necesarias, como mínimo un VPN (red privada virtual por sus siglas en inglés), añadió.
Bajo esta premisa, Torres-Llosa refiere que ciertas actividades pueden dilatarse o no ejecutarse cuando se realiza un proceso de teletrabajo. Aquí cabe mencionar la importancia de la firma electrónica, que no está implementada por muchas empresas.
“Para ciertas operaciones se requiere la firma de ciertos documentos, algunos pueden dar la aceptación por mail por ser un proceso de emergencia, pero podría ser o no aceptable”, mencionó.
Un caso, por ejemplo, es en el área logística, cuando un jefe de compras debe aprobar operaciones por montos altos, donde la opción es que esté habilitado el visto bueno fuera de la oficina.
Pocas empresas
Lo cierto, continúa el ejecutivo, es que muy pocas empresas en el país están acostumbradas a aplicar el teletrabajo en su real magnitud. “No tenemos cifras exactas, pero podemos decir que no lo han venido usando como parte de su propuesta porque una red de teletrabajo se hace con tiempo y presupuesto”, sostuvo.
Así, hace referencia a los call center que en esta coyuntura han estado operando como salida a consultas de los clientes, labor que debe realizarse no desde casa sino desde la base de operaciones. “En un “contact center” el sistema está en un entorno que tiene facilidades para realizar el trabajo de manera adecuada y que no lo va a tener en su casa”, argumentó el ejecutivo, quien agregó que todo esto es un proceso de entrenamiento diario que no cree que se alcance", agregó Torres-LLosa.
Si bien en estos momentos el trabajo se está aplicando por espacio de 15 días, el que se extienda este período y que las industrias puedan soportarlo dependerá del ramo en que se desempeñen.
“La economía de servicios en el país es bastante grande en términos de volumen, pero si hablamos de una industria que requiere procesos que interactúen con terceros fuera de la empresa, no creo que pueda durar mucho tiempo”, refirió el ejecutivo.
El dato
Beneficios. Para el socio de Amrop Perú, en estos momentos más empresas han tenido que adoptar el grado de teletrabajo y es momento de ver qué ajustes hacer para avanzar en el proceso. “Son más beneficios que perjuicios los que se obtienen como el caso de ahorro en tiempo, tráfico, entre otros”, señaló José Torres-Llosa.