El Ministerio de Cultura (Mincul) oficializó, luego de posponerlo varias veces, la venta de entradas a Machu Picchu online el último 20 de enero. El portal web “tuboleto.cultura.pe” centraliza los museos y atractivos arqueológicos a su cargo. Sin embargo, queda pendiente definir la forma para garantizar la continuidad de este servicio digital.
Según comentó la ministra Leslie Urteaga a Gestión, lo más urgente es definir qué pasará con la web donde se ofrecerán los tickets hasta mediados del 2024, cuando vence el contrato de alquiler que el Mincul firmó con la ticketera Joinnus, que administra la página.
Además, quedan pendiente modernizar el sistema de pago, que está a cargo de la Dirección Descentralizada de Cultura (DDC) del Cusco y seguir fortaleciendo la capacidad informática del Mincul para, eventualmente, dirigir directamente el portal.
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Plazos
En agosto del 2023, el Mincul firmó con la ticketera Joinnus un contrato, bajo la Ley de Contrataciones del Estado, para el alquiler de una plataforma digital donde estuvieran disponibles los boletos para ingresar a los museos y sitios arqueológicos a cargo de la cartera.
Ese portal es tuboleto.cultura.pe y funciona desde septiembre. A la fecha, además de Machu Picchu, se pueden comprar entradas para Kuélap, las Líneas de Nazca, el Monumento Arqueológico y el Museo de Sitio de Pachacamac, Cuarto del Rescate y Conjunto Monumental Belén, el Museo Nacional Chavín, el Museo de Arte Italiano y Chan Chan.
El contrato con Joinnus, sin embargo, dura un año y está próximo a vencer. “El contrato de alquiler es hasta agosto de este año. Desde el Estado vemos la necesidad de darle continuidad y eficiente. La propuesta en su momento fue salir con un acuerdo de ese tipo”, detalla Urteaga.
Así el Mincul debe definir cómo procederá cuando venza el contrato actual con la ticketera. La primera opción, sostiene la ministra, es extender la vigencia del mismo. Otra es negociar con otra de las ticketeras que en su momento estuvieron interesadas en administrar el portal web.
“Cuando salimos al mercado a buscar un interesado, invitamos a seis empresas. Dos de ellas fueron postores finales y, a partir del principio que marca la Ley de Contrataciones del Estado, se escogió al que menor costo implicaba: Joinnus”, señala Urteaga.
La tercera opción, ideal bajo consideración de la ministra, es que el Mincul estrene su propio portal. Un deseo que hoy está lejos de hacerse realidad en el corto plazo.
“Es un proyecto que el Mincul tiene incluso desde antes de la pandemia. Ya teníamos un portal de venta para Machu Picchu a cargo de la DDC, pero hasta por caídas de energía se colgaba y no tenía los mecanismos de seguridad adecuados. La DDC pedía presupuesto, pero se invirtió más en patrimonio histórico”, asegura Urteaga.
Este portal de la DDC, vale decir, ya no está operativo. De acuerdo a Urteaga Joinnus tampoco tiene un monto fijo de ganancia. Sus ingresos dependen de la venta diaria.
“Ganan 3.3% más el Impuesto General a las Ventas (IGV) por boleto. Eso quiere decir que, si durante marzo cerramos Machu Picchu por mantenimiento, no hay comisión que pagar”, asegura.
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Demoras técnicas
La inclusión de la maravilla del mundo en el portal del Mincul estaba pactada inicialmente para octubre. Sin embargo, ante la oposición de operadores turísticos en Machu Picchu Pueblo y el Cusco, la cartera pospuso su estreno.
Volvieron a intentarlo en varias fechas de diciembre sin éxito por el mismo motivo: había un rechazo sobre Joinnus y su rol en la venta de entradas. Aparte, se cuestionó que no se mantuviera la venta de 1,000 entradas presenciales de un total de 4,500 habilitadas diariamente para ingresar a Machu Picchu.
De acuerdo a Urteaga, ambos baches ya están superados por las capacitaciones que el Mincul ha hecho a operadores turísticos de la zona para darles información sobre el sistema.
“Hemos decidido continuar con la venta presencial, que será para ingresar al día siguiente, pero se usará el mismo sistema. Es decir, el proceso de compra a través de boleterías se hará mediante el portal web también”, afirma.
En total serán cinco ventanillas las que estarán habilitadas en Machu Picchu Pueblo. El objetivo es que estén en diversos puntos de la localidad, para no generar aglomeraciones y descentralizar la compra.
“Así los visitantes también se animarán a conocer el pueblo. Suelen llegar muy temprano, hacen su visita a la Llaqta y se van. Proponemos otras actividades para que puedan conocer las aguas termales y la actividad cultural nocturna”, explica Urteaga.
Con esos avances, la ministra reconoce que el ingreso de Machu Picchu al portal web del Mincul también fue por dificultades técnicas. “La DDC habilitó tickets del Camino Inca y la Llaqta para fechas posteriores a las que habíamos anunciado. Tuvimos que ver cuántos ya estaban reservados. Fue engorroso”, refiere.
Según Urteaga, esta posible superposición ya está controlada. Lo que también tuvo que adecuarse es el pago de reservas que los operadores turísticos administran.
“Ellos tienen un ingreso al sistema con usuarios especiales donde las reservas quedan pendientes de cancelar. Los operadores hacen colas en las sedes del Mincul y pagan principalmente en efectivo. Hacia falta tener la opción de hacer transferencias, cheques de gerencia y otras alternativas financieras que hoy tenemos. Eso también dilató el lanzamiento”, admite la ministra.
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Licenciado en Periodismo por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Parte del equipo fundador del medio digital Sudaca. Experiencia en cobertura política, social y económica peruana.
