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La industria del plástico es uno de los sectores productivos que más rápido se ha recuperado en el proceso de reactivación económica. Dentro de dos meses podría tener los niveles de producción y comercialización anteriores a la llegada de la pandemia del coronavirus, de acuerdo con las estimaciones de la Asociación Peruana de la Industria del Plástico (Apiplast).
“Todavía no se ha llegado a los niveles (de producción) que se tenían antes, pero se ve luz al final del túnel. Creo que si se sigue a este ritmo, en un par de meses podríamos estar en un buen nivel, posiblemente como el que teníamos antes de la pandemia”, sostuvo el presidente de Apiplast, Eduardo Farah Hayn, en diálogo con Gestion.pe.
Hasta mediados de julio, el sector operaba al 50% de su capacidad, pues la demanda del mercado se contrajo y se multiplicaron los contagios de coronavirus entre los trabajadores de las fábricas. No obstante, a medida que avanza la reactivación económica, y mientras se mantienen las medidas de prevención de contagios, las ventas de plástico se han acelerado y una parte de la industria ya está operando a más del 70% de su capacidad.
Los productos plásticos más demandados son los de embalaje (principalmente las bolsas descartables de polietileno) y los artículos de policloruro de vinilo (PVC).
Hasta meses atrás el Gobierno articulaba medidas para desalentar el consumo del plástico de un solo uso. Sin embargo, la gran mayoría de hogares y negocios han encontrado en las bolsas de este tipo la opción más cómoda para proteger los alimentos de una eventual contaminación y realizar sus compras.
Incluso el Ministerio de Salud (Minsa) señaló a mediados de abril que las bolsas de plástico de un solo uso son una buena opción para hacer las compras durante la pandemia. Otras opciones, como las bolsas de tela, son más ecológicas pero necesitan lavados constantes para no ser vehículos de contagio.
Los sectores que más han incrementado su demanda de plástico son las agroexportaciones y la industria del embalaje. Esta última se encarga de empaquetar los productos industriales, como los alimentos procesados.
Además, la demanda de tecnopor se ha incrementado gracias al aumento del delivery en la venta de comida, puesto que permite mantener el calor; y millones de peruanos usan obligatoriamamente protectores faciales al subir al transporte público cada día.
“La industria del plástico está logrando reactivarse porque es transversal a todos los demás sectores. Gracias al plástico estamos haciendo la batalla al coronavirus”, expresó Farah.
Por todo ello, el sector podría cerrar sin una caída este año, según las proyecciones más optimistas de Apiplast, a pesar de la paralización parcial y de la caída de la demanda que sufrió en los primeros meses del estado de emergencia. No obstante, considera muy poco probable que se registre un crecimiento.
Antes de la pandemia, en el país habían unas 300 empresas formales y un número indefinido de informales productoras de plástico, que movían unos US$ 2,000 millones por año.
