Perú y Brasil son los países que dominan actualmente el mercado de uvas a través de su producción. El precio del producto brasileño oscila entre 4,10 y 4,30 euros el kilo, sin embargo el peruano tiene un costo menor y fluctúa en 3,40 y 3,50 euros por kilogramo. No obstante, el país andino viene sintiendo los efectos del fenómeno de El Niño.
De acuerdo a Global Market, un importador de esta fruta advierte que los productores peruanos están sufriendo mucho con el cambio climático en un escenario donde la temporada de uva de mesa de Califiornia terminó anticipadamente por un huracán que acabó con una importante producción en la zona sur del Estado y el Perú tuvo que realizar envíos al mercado estadounidense antes de lo habitual.
Aunque la producción de uvas en Ica es muy positiva, la expectativa total de exportación terminaría entre 60 y 62 millones de cajas, por debajo de los 73 millones que se pronosticaba en la pretemporada. A ello se suma que la cosecha en el sur de Ica terminaría temprano, entre la segunda y tercera semana de enero.
LEA TAMBIÉN: Cerro Prieto y el tránsito a una nueva genética de arándanos con foco en China
Asimismo, la demanda de uvas en América del Norte es muy fuerte y, dada la escasez de oferta de Perú, se espera que se mantenga estable durante toda la temporada peruana. Sin embargo, una vez que se terminen los envíos nacionales, el mercado estadounidense dependerá de Chile hasta que México inicie a operar en abril y mayo.
Precios elevados
La uva de mesa en el mercado español terminó el 2023 con precios muy elevados debido a la caída en los volúmenes de la uva blanca tradicional con pepitas producida localmente, así como la uva sin pepitas de Perú.
En detalle, dado que las uvas blancas con pepitas han sido caras, muchas cadenas de supermercados españolas han estado recurriendo a variedades sin pepitas importadas, que también escasean, dado que el mercado peruano estaba registrando una caída del 30% de su producción, sin embargo, el valor de este producto exportado por Perú también ha sido elevado ante la menor oferta y el mayor costo en su cosecha.
LEA TAMBIÉN: El Grupo DC y la nueva estrategia corporativa del holding dueño de Camposol
En ese sentido, Perú se concentró en América del Norte mientras que la impasibilidad del Mar Rojo obligará a los exportadores de uva indios a enviar sus uvas a Europa a un coste mucho mayor alrededor del Cabo de Buena Esperanza. De esta manera, los proveedores de esta fruta estarán más en línea con sus pares sudafricanos en términos de costos de flete y tiempo de tránsito al mercado.