La compañía tecnológica japonesa Fujifilm anunció este lunes que pondrá fin en abril de 2021 a la cooperación en ventas y a la licencia que le permite usar la marca estadounidense Xerox, para entrar por cuenta propia en los mercados de Estados Unidos y Europa.
Fujifilm ya ha notificado a la firma originaria de Conneticut su decisión de no renovar el contrato de cinco años que regula sus ventas territoriales (la empresa conjunta Fuji Xerox cubre la región Asia-Pacífico y Xerox, EE.UU. y Europa), que vence el 31 de marzo del 2021, según explicó en un comunicado.
“La decisión de poner fin al acuerdo dará como resultado la eliminación de tales restricciones territoriales de ventas a partir de abril del 2021, allanando el camino para que Fuji Xerox expanda su negocio en todo el mundo bajo una nueva marca original”, argumentó.
Tras el vencimiento del acuerdo, Fuji Xerox, la empresa conjunta de impresoras y fotocopiadoras que ambas fundaron en 1962, pasará a denominarse Fujifilm Business Innovation y buscará “expandirse a nuevas áreas de negocio” como los servicios relacionados con la nube, la inteligencia artificial o el internet de las cosas (IoT).
El control de Fuji Xerox pasó a estar en manos de Fujifilm en noviembre del 2019, tras llegar a un acuerdo con la empresa estadounidense para comprarle su participación en la entonces compañía conjunta.
“Fuji Xerox está fuertemente posicionada para hacer negocio de forma dinámica y más libremente de una forma verdaderamente global”, dijo en el comunicado su presidente, Kouichi Tamai.
Tamai señaló que convertirse en una filial completa de Fujifilm les permite “tomar decisiones de negocio más eficientes sobre la inversión en nuevos negocios, la construcción de alianzas y búsqueda de adquisiciones con una perspectiva mundial”.
Fujifilm y Xerox mantuvieron una colaboración estrecha durante más de medio siglo, hasta que un plan de fusión, anunciado en 2018, fue descartado por el rechazo de algunos de los principales accionistas de la empresa estadounidense.
La japonesa llegó a presentar una demanda ante la justicia estadounidense contra Xerox en la que reclamaba compensación por la cancelación unilateral de la operación, aunque decidió retirarla tras alcanzar el acuerdo de compra de Fuji Xerox.