
La recolección de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) en el Perú mantiene un crecimiento sostenido y acelerado: pasó de5,700 toneladas en 2020 a alrededor de 25,600 toneladas en 2024, un salto equivalente a unincremento de 450 %, de acuerdo con el Sistema de Información para la Gestión de Residuos Sólidos (Sigersol No Municipal) del Ministerio del Ambiente (Minam). En ese contexto, la peruana Comimtel ha incrementado progresivamente sus niveles de recuperación a través de su planta en Lima, que cuenta con una capacidad instalada de1,200 toneladas por mes. Ahora, la compañía se prepara para inaugurar susegunda infraestructura, con lo que consolida un nuevo eje de crecimiento operacional y estratégico para los próximos años.
Braulio Rossel, jefe de operaciones e innovación de Comimtel, señaló que la compañía registró un incremento significativo en el volumen procesado entre 2024 y 2025, cercano al 39%. “A pesar de haber sido un reto ambicioso y haberlo conseguido, este salto nos muestra que ahora debemos enfocarnos en optimización, automatización y eficiencia hacia el siguiente año, con miras a sostener el ritmo en el mediano plazo”, comentó.
En esa línea, explicó que para el próximo año la empresa manejará una proyección conservadora. La meta para 2026 considera un aumento de apenas 2% en procesamiento, bordeando las 8,380 toneladas, lo que representa unas 200 toneladas adicionales frente a lo logrado este año. “Nuestro enfoque en eficiencia digitalización y optimización de procesos impactará positivamente en nuestros márgenes operativos”, afirmó.

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Los frentes de inversión hacia 2026
Rossel detalló que uno de los principales proyectos de la compañía es la habilitación de una segunda planta en Ventanilla, con un tamaño cercano a 2,500 m², casi el triple de su única planta actual, ubicada en el distrito de San Martin de Porres. Explicó que solo en infraestructura, la inversión supera los US$ 200,000, un desembolso realizado de forma gradual desde 2024 y financiado íntegramente con capital propio. Además, como parte de esta ampliación, la empresa también aprovechará los nuevos espacios para invertir en maquinaria, alineada a los frentes de optimización y mejora operativa.
Según indicó, la inversión en nuevos equipos busca generar sinergias en varios puntos: agilizar el procesamiento, incrementar las toneladas tratadas por día y, sobre todo, mejorar el aprovechamiento del RAEE. “Mientras más valor podamos extraer de cada residuo que llega a la planta, mejor, porque reducimos la disposición final; y nuestro objetivo es justamente no disponer nada al final”, señaló el directivo.
Rossel añadió que estos equipos también deben mejorar las condiciones para ofrecer productos finales —como plásticos y metales— en formatos más adecuados para el mercado, ya sea triturados, compactados o convertidos en insumos líquidos para combustible. Uno de los lineamientos es adaptar esos materiales para que sean más aceptados comercialmente y aumentar su aprovechabilidad.
Respecto a los planes anunciados en 2024 para instalar nuevas plantas en provincias, Rossel indicó que el volumen de RAEE generado fuera de Lima aún no justifica una planta adicional. “La visión existe, naturalmente en las principales ciudades donde más RAEE se genera, pero hasta no cerrar la planta de Ventanilla preferimos no avanzar con una nueva infraestructura”, afirmó.
Lo que sí están evaluando, añadió, es ampliar capacidades de almacenaje en distintas regiones, debido a que gran parte del procesamiento de productos finales se realiza en Lima. Por ello, la empresa está impulsando alianzas estratégicas con municipalidades, universidades y otras instituciones para instalar puntos de acopio en todo el país. “Esto nos permite consolidar carga y traerla a Lima para su procesamiento”, precisó.

Otro frente de inversión es la digitalización de procesos, con el objetivo de que las futuras inversiones se orienten hacia un modelo data-driven que permita capturar y analizar más información. Si bien la empresa ya cuenta con trazabilidad completa, Rossel reconoció que aún pueden avanzar hacia una etapa superior.
“La información es sumamente importante, sobre todo si queremos implementar modelos de inteligencia artificial que nos permitan proyectar la llegada de RAEE, calcular valorizaciones antes de recibirlo o estimar tiempos de planta y equipos. Hoy, la tecnología no nos ayuda lo suficiente porque varios procesos siguen siendo muy manuales”, señaló el ejecutivo de Comimtel.
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Evalúan llegar a dos nuevos países hacia 2026
Rossel explicó que Comintel mantiene una alianza vigente con Umicore, en Bélgica, para la exportación de tarjetas electrónicas, pero que la empresa ya explora nuevas oportunidades en el exterior. Actualmente, están en conversaciones con un proveedor en Francia, con sede en París, interesado en adquirir tarjetas, así como con empresas de Asia, principalmente China.
El directivo precisó que estas evaluaciones avanzan con cautela porque cada proveedor establece condiciones técnicas específicas. “No solo se trata de exportar; las tarjetas electrónicas tienen distintas calidades, y esas calidades deben analizarse en laboratorio”, señaló.
Hoy, los análisis se realizan únicamente cuando el material llega al país de destino, debido a que Perú aún no cuenta con tecnología para procesar tarjetas electrónicas. Sobre los plazos, indicó que concretar nuevas alianzas hacia 2026 sería lo ideal, aunque subrayó que la decisión dependerá de diversos factores operativos y comerciales, y de la coordinación con la alianza que ya mantienen con Unicorn.
Consultado sobre la posibilidad de incursionar en nuevos negocios, Rossel señaló que la empresa evalúa distintos proyectos. Explicó que parte de la nueva maquinaria adquirida —destinada tanto para optimización operativa como para un procesamiento más eficiente del producto final— también abre la puerta a un mayor aprovechamiento del RAEE.
“Estamos explorando varias alternativas. Una de ellas es desarrollar madera plástica, un producto comercializable que podría derivar en una nueva línea de negocio. Sin embargo, aún no está definido si será una unidad independiente o si destinaremos esa producción para uso interno, ya sea en contenedores, alianzas estratégicas o incluso en nuestras propias construcciones. Las posibilidades son amplias”, afirmó el directivo.

Licenciado en Comunicación de la Universidad de Lima, con especialidad de periodismo y comunicación corporativa. Actualmente redacto en la sección negocios del Diario Gestión.







