Un acuerdo de metales de US$ 1,000 millones negociado por el fondo ACG Acquisition Company fue cancelado luego de retrasos cuando las diferentes partes, que incluían a una minera global y a los principales fabricantes de autos como inversores ancla, intentaron revisarlo, dijo el jueves ACG.
ACG, una empresa de adquisiciones con fines especiales (SPAC) que cotiza en Londres, planeaba comprar una mina de níquel y una mina de cobre de Appian Capital, apostando por la creciente demanda de metales necesarios para la transición mundial a la energía verde.
En junio, la minera Glencore; Stellantis, matriz de Chrysler, y la unidad de baterías PowerCo de Volkswagen acordaron respaldar el negocio mediante una inversión de capital. Se esperaba que la transacción estuviera cerrada para agosto.
“ACG anuncia hoy que, a pesar de sus mejores esfuerzos, no se han consensuado cambios en el Acuerdo de Adquisición y éste ha sido rescindido”, dijo la empresa en un comunicado.
ACG y Glencore declinaron hacer comentarios.
Los débiles datos económicos de China -el mayor consumidor de metales del mundo- informados a partir de agosto, afectaron el apetito de los inversores por el acuerdo, dijo a Reuters una fuente directamente familiarizada con la situación.
Los precios del níquel han caído un 37% en lo que va del año, mientras que el cobre ha perdido un 2%.
“El acuerdo fracasó por el precio. Appian quería más para las minas de lo que los compradores consideraban realista, especialmente porque el precio del níquel ha bajado”, dijo otra fuente.
Appian no respondió a una solicitud de comentarios de Reuters.
Las SPAC son empresas fantasma que recaudan dinero a través de una oferta pública inicial (IPO) y luego se fusionan con una empresa privada, haciéndola salir a bolsa. ACG habría sido la primera SPAC minera que cotiza en Londres.
