El Banco Central Europeo dijo que los prestamistas de la región tendrán que estimar el riesgo que podrían enfrentar por el cambio climático, tanto en sus operaciones crediticias como comerciales, cuando se sometan a una prueba de resistencia el próximo año.
Los bancos tendrán que predecir cómo evolucionarán sus balances durante los próximos 30 años, así como las pérdidas relacionadas que podrían enfrentar en la transición a una economía más sostenible, según una metodología publicada por el banco central este lunes.
El BCE también está pidiendo a los prestamistas que evalúen el impacto de un “fuerte aumento” teórico en el precio de emisiones de carbono durante un período de tres años. Bloomberg informó la inclusión de exposiciones comerciales en septiembre.
En la prueba de resistencia, que se llevará a cabo de marzo a julio de 2022, el BCE analizará de manera más detallada los problemas que los bancos podrían enfrentar debido a las políticas de mitigación climática que podrían sacar del negocio a las empresas contaminantes, así como a las condiciones climáticas extremas.
El organismo de control culpó a la industria a principios de este año por ser demasiado lenta para enfrentarse a los riesgos relacionados con el cambio climático, citando datos irregulares y falta de atención por parte de los ejecutivos.
La parte a corto plazo de la prueba asume que los precios del carbono suban en US$ 100 por tonelada en el período hasta el 2024, varios años antes que en los escenarios desarrollados por los bancos centrales y reguladores internacionales.
Si bien ese es un “riesgo de cola”, tiene la ventaja de probar la vulnerabilidad de las exposiciones actuales de los bancos a “una transición desordenada”, dijo el BCE.
Un “aumento brusco e inesperado en el precio de emisiones de carbono u otras medidas no relacionadas con el precio para frenar emisiones” afectaría a las industrias intensivas en carbono, mientras que otras partes de la economía también verían un impacto indirecto a través de las cadenas de producción y otros efectos de segunda ronda, dijo el BCE.
Impacto de capital
El ejercicio, que es parte de una revisión más amplia de cómo los bancos están abordando los riesgos climáticos, también incluye preguntas sobre cuántos ingresos generan los prestamistas de las industrias intensivas en carbono, así como el volumen de emisiones que financian.
Además de los escenarios sobre el riesgo de transición, se pedirá a los bancos que simulen el efecto de los riesgos físicos, como las inundaciones, en un horizonte de un año.
Mientras los políticos europeos se apoyan en los bancos para desviar la financiación de las industrias contaminantes, el BCE se ha centrado en garantizar que los bancos estén preparados para los riesgos en un mundo más cálido. El lunes, el BCE reiteró que no habrá un aumento directo en los requisitos de capital bancario a partir de la prueba, pero que los prestamistas que no puedan comprender sus riesgos podrían enfrentarse a medidas más altas.