El operador logístico peruano AFE prepara una nueva estrategia el próximo año en busca de crecer en su facturación frente al 2022. Y es que la empresa, este año con respecto al 2021, ha disminuido sus ventas en doble dígito.
“El negocio logístico en general ha bajado a este ritmo, influenciado por la pandemia, así como por la crisis política, económica, y social del país. En el caso de nuestra facturación, esta disminuirá en alrededor de 30% este año”, señala, el gerente general de la empresa, Justo Carbajal.
Pero en su búsqueda de crecer hasta 10% el próximo año, la compañía mirará al exterior y apostará por aterrizar en nuevos mercados internacionales, como los de Europa y Asia.
Así, adelanta que abrirán un almacén en Alemania, y otro en China. Actualmente ya atienden a Estados Unidos, con servicios de transporte de carga, almacén, y courier.
“Queremos comenzar brindando transporte de carga, y warehouse (almacenaje) en Alemania, y China, para luego continuar con nuestros demás servicios (distribución, courier, cross docking, y embalaje)”, detalla.
De esta manera su negocio internacional pasará de representar el 15% de su facturación anual a ser alrededor del 50%, en un primer año de funcionamiento de sus nuevas operaciones.
Planes locales
En el caso del mercado local, AFE establecerá alianzas con seis partners internacionales, de Estados Unidos, Europa, y Asia. Y se prevé al menos llegar a hacerlo con tres al cierre del año, y con los demás en el 2023.
“Una de estas empresas busca entrar al negocio logístico en el país. Las demás son de suministros; fabricantes de artefactos, material médico, medicina, entre otros, que quieren llegar al país, y requieren que un partner les brinde servicios logísticos para almacenar y distribuir a nivel nacional”, dice.
Y frente a la campaña navideña (octubre-diciembre) de este año, prevén mover hasta un 20% más de mercadería, comparado con la misma temporada del 2021. Sin embargo, esto no será suficiente para lograr registrar crecimiento en su facturación anual.
“Además, pese a los sobrecostos logísticos no podemos trasladarlos necesariamente a los clientes, debido a que el mercado es muy sensible, y corremos el riesgo de perderlos. Hemos logrado incrementar algo, sin embargo, sin cubrir los costos en los que se incurre, por ejemplo, solo el costo de combustible es casi el doble. Estamos castigando las utilidades para no perder a los clientes”, anota.