El 2023 es, hasta ahora, un año duro para la construcción en el Perú. El sector habría caído 8.4% en junio, de acuerdo con la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco).
Con este resultado, el desempeño acumulado en el primer semestre del año es de -9.8%, proyectó el gremio durante la presentación de su más reciente Informe Económico de la Construcción (IEC).
Esto se torna en un desafío para el sector de cara al segundo semestre del año si se quisiera alcanzar la proyección del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). El BCRP proyecta que el “crecimiento” del sector construcción para este año será de 0%.
Al respecto, Capeco alertó que alcanzar esa proyección reta al sector a crecer 7.9% promedio entre julio y diciembre. Con un segundo semestre marcado por el impacto de El Niño global, el gremio no es optimista de que se pueda alcanzar siquiera el crecimiento nulo proyectado por la entidad monetaria.
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Explicaciones de la caída
Capeco indicó que el descenso de la construcción tiene explicación en dos factores principales: el consumo de cemento y retracción de la inversión privada, rezagos -dijo- del impacto de la gestión de Pedro Castillo.
De acuerdo con cifras presentadas por el gremio, el consumo de cemento habría disminuido 12.7% en junio, con lo que registraría un descenso en once de los últimos doce meses. Además, estaría en caída consecutiva desde setiembre del año pasado.
Al respecto, Guido Valdivia, director ejecutivo del gremio, puntualizó que el consumo de cemento, junto al avance de la obra pública, explican casi el 98% del PBI de la construcción.
También resaltó que el mal desempeño de construcción entre enero y mayo ha sido solo superada por la pesca, aunque por razones estacionales.
En el caso de la inversión privada, Capeco puso como ejemplo a la minería. La inversión en este sector disminuyó 19.7% en los cinco primeros meses del 2023, según cifras del INEI.
De esta forma, sumada la paralización de obras por los indicios de corrupción relacionadas al Fondo MiVivienda (FMV), la construcción no pudo sostenerse en lo que va del año. “La corrupción no solo paralizó obras sino que, en el caso de los programas de vivienda social, hay impacto en la confianza de la gente y bancos sobre el financiamiento”, dijo Valdivia.
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