El servicio de factoring es bastante positivo dentro del ecosistema de microfinanciamiento, pero en el caso de las cajas su implementación estaría enfocada en la pequeña empresa y no en la microempresa, pues no se tienen las condiciones de demanda y garantía, señaló, Wilber Dongo, gerente general de Negocios de Caja Arequipa.
El factoring es un servicio financiero que le permite a una empresa descontar las facturas que emite a una tasa respectiva. Es decir, se le otorga a la empresa que ofrece servicios de factoring la factura a cambio de un monto menor al que recibiría en un futuro, obteniendo así recursos de manera inmediata.
Dongo mencionó que, de ofrecer el financiamiento vía factoring, este no tendría relevancia para la mayoría de las microempresas, pues este segmento generalmente vende el producto final y no a otra empresa. Es decir, sus clientes son las familias, los cuales pagan de forma inmediata. Mencionó que, en el ecosistema de cajas, esta podría ser una razón que evita el despliegue del servicio.
“No es que no haya un segmento de los microempresarios que requiera de estos servicios, pero es acotado. El microcrédito contempla a 70% de comerciantes, 20% de servicio y solo 10% en producción como carpintería o metalmecánica, los que sí podrían dar alguna factura, pero igual es muy difícil”, reconoció.
Agregó que este producto encaja más para pequeña empresa, que tienen deudas a partir de S/ 150,000. No se puede desplegar este financiamiento si la demanda es poca. Cada entidad analiza de forma interna si es conveniente o no ofrecer el servicio″ anotó.
También señaló que, para poder atender la demanda se necesitaría de las garantías necesarias en cuanto al pago de la factura, lo cual se hace complicado cuando se trata de microempresas.
“Es posible que las microempresas interactúen con otras empresas que no ofrezcan las garantías o no den señales sólidas de su solvencia, lo cual hace más difícil que se ofrezca el servicio. Si se quiere masificar el uso de esta herramienta, el Estado podría iniciar la promoción con una garantía respecto al reembolso de un porcentaje de la factura en caso de incumplimiento, como fue con Reactiva Perú. La microempresa debería ser fortalecida respecto a la confianza que genere al sector privado, y con ello sus facturas podrían tener mayor garantía”, dijo.
En el mismo sentido, Joel Siancas, presidente de Caja Sullana, mencionó que el factoring es un servicio que han estado evaluando y que aplicaría a nivel de pequeña empresa, mientras que para microempresa no, pues no se dan las condiciones.
“El tema de microempresa no se vincula al factoring en este momento, es más de trato directo con el consumidor y no tanto con las empresas. Dar este servicio a la microempresa no es atractivo, pues no se incentiva la actividad de este segmento. Hoy hay mas bien un sesgo en contra, con medidas como el aumento del sueldo mínimo”, apuntó.
Indicó que es posible que Caja Sullana ya tenga implementado el servicio de factoring para las pequeñas empresas antes del primer trimestre del siguiente año.
“Necesitamos crecer a nivel de colocaciones sobre todo en el mercado de ciudades grandes donde los proveedores resulten ser más importantes y tengan una relación más consolidada con sus clientes, que de garantía del pago de facturas. Estamos considerando incorporar nuevos clientes para ello”, anotó.