Desde que la Autoridad del Transporte Urbano de Lima y Callao (ATU) asumió la administración del Sistema Integrado de Transporte (SIT), en el 2019, solo se han adjudicado 15 paquetes de rutas de las 49 que tienen los corredores viales complementarios. Para julio del 2020 estaba prevista la licitación de cinco corredores pero se fue postergando.
No obstante, la reciente prepublicación de una propuesta técnica para incorporar los buses eléctricos híbridos en el SIT sería el paso que faltaba para que dicha Autoridad pase de trabajar en el marco legal a los próximos procesos de licitación, así lo cree Ellioth Tarazona Álvarez, gerente Técnico Normativo de la Asociación Automotriz del Perú (AAP). “En el 2023 deberían realizarse las licitaciones”, anotó.
Y es que el último 26 de mayo, la ATU publicó el proyecto que establece las especificaciones técnicas para la estandarización de las características físicas y motrices del bus patrón híbrido. Con ello, ya completa los cuatro tipos de buses que podrán participar en las licitaciones, pues el año pasado hizo lo mismo -las especificaciones- para el bus patrón a diésel, gas natural vehicular (GNV) y 100% eléctrico.
“De esta manera, no se estará cerrando las puertas a ningún proveedor, sin embargo, en las próximas licitaciones se tendrían que promover puntajes adicionales a quienes ofrezcan tecnologías más limpias y modernas. Siempre será mejor seguir el ejemplo de Santiago de Chile o Colombia, e irnos directamente a lo eléctrico”, señaló Tarazona.
No obstante, anotó que los buses híbridos también ofrecen la posibilidad de reducir hasta en un 40% los niveles de contaminación respecto a un bus a diésel.
En un comunicado, Eduardo Beingolea, jefe de la Dirección de Integración de Transporte Urbano y Recaudo (DIR) de la ATU, explicó que “los vehículos híbridos tienen la capacidad de aprovechar una cantidad de energía durante el proceso de frenado para convertirla en electricidad, almacenarla y utilizarla más tarde, lo que se conoce como freno regenerativo”.
Especificaciones
Según la propuesta de la ATU, los buses eléctricos híbridos deberán tener 9, 12, 18 o 27 metros de largo y una capacidad de entre 40 y 250 pasajeros. Al igual que con los estándares del Bus Patrón Eléctrico y el Bus Patrón a GNV o diésel, estos buses poseerán puertos USB para cargar la batería de los celulares y en la parte frontal un rack para trasladar bicicletas, además de aire acondicionado y pisos bajos que permitan el ingreso de personas con alguna discapacidad física.
Los vehículos híbridos poseen un motor eléctrico y otro a GNV o diésel, que permite una reducción de hasta un 30% del combustible, en comparación con un bus convencional. Además, estos buses tienen la ventaja de que no necesitan enchufarlos a la corriente eléctrica para cargar su batería, pues esta se puede cargar con la energía que genera el motor diésel o el motor GNV y también mediante el sistema de frenado regenerativo.
El proyecto de reglamento recibirá comentarios de los fabricantes, operadores de transporte, entidades públicas y privadas y la ciudadanía en general hasta el 15 de junio.
¿Pero hay interés de las empresas para adquirir estos vehículos? Tarazona responde que “el interés siempre está ahí”, y ya existen algunas empresas, entre ellas mineras, que han comenzado a probar con buses eléctricos para el traslado de su personal, no obstante, para el transporte masivo, las solicitudes a las fábricas comenzará cuando exista un proceso de licitación ad portas.
En corto
De acuerdo a la organización Transitemos, entre los actuales corredores complementarios, el Metropolitano y el Metro de Lima, se realizan 1.2 millones de viajes de los más de 20 millones que se registran diariamente en Lima y el Callao. La diferencia es una demanda cubierta -en su mayoría- por el transporte informal.
En esa línea, la ATU carga una gran responsabilidad para avanzar con la anhelada reforma del transporte.