El Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) anunció que los productores peruanos podrán iniciar la exportación de arándanos a Malasia a partir de este año, luego que el Departamento de Agricultura del país asiático (DOA por sus siglas en inglés) confirmara los requisitos fitosanitarios para la importación de este producto.
El Senasa logró concretar estos acuerdos y será el responsable de asegurar, mediante la certificación fitosanitaria, que se cumplan con los requisitos establecidos por ambos países.
“Seguimos comprometidos con el desarrollo agrario del país; en esta oportunidad, con el acceso de nuevos mercados para la producción frutícola nacional, brindando a nuestros agricultores más oportunidades de mercado y alternativas para la comercialización”, agregó Miguel Quevedo, jefe del Senasa.
Para la exportación de este producto hacia este mercado, los envíos de arándanos deberán provenir de campos certificados, y haber sido procesados en empacadoras autorizadas; también deberán pasar inspección fitosanitaria, acorde a los requisitos establecidos por el país importador.
Una vez aprobada la inspección fitosanitaria, los envíos deben ser sometidos a tratamiento de frío. Es importante considerar que los lugares de producción y plantas empacadoras de arándanos estén registrados en la lista oficial autorizada por Senasa y DOA.
Malasia es una nueva oportunidad para los arándanos peruanos, que se suma a los 58 mercados a los que ya se tiene acceso; entre los principales, tenemos a Estados Unidos, Países bajos, China, Reino Unido, Canadá, España, Inglaterra entre otros, que ya disfrutan de la pequeña fruta púrpura.
El Perú se ha consolidado como primer país exportador de arándanos a nivel mundial, logrando enviar en la última campaña 162,459 toneladas, producidas principalmente en La Libertad, Lambayeque, Lima, Ica, Ancash, Piura; y Moquegua.
A pocos meses de iniciar la presente campaña de exportación, el Perú ya logró enviar 62,724 toneladas a 31 mercados internacionales. La proyección es superar esta cifra, al mismo ritmo que lo hace cada año.