Una serie de factores internos y externos vienen afectando de manera crítica el desarrollo del sector agrícola, clave para la economía y el empleo en el Perú, advirtió la Asociación de Gremios Productores Agrarios del Perú (AGAP).
A través de un comunicado, recordó que uno de los principales problemas que enfrentan es el estrés hídrico que afecta a varias regiones agrícolas, en especial a Piura, donde la falta de agua en los reservorios de Poechos y San Lorenzo está poniendo “en jaque” a los productores locales.
Esta crisis, advirtió AGAP, es consecuencia de la falta de mantenimiento y la falta de nuevas inversiones en infraestructura hídrica en el país debido a gestiones ineficientes.
A la problemática del agua se suma la inseguridad ciudadana, con un incremento incontrolable por el crimen organizado, la minería ilegal y el narcotráfico, factores que están impactando en el desarrollo de la actividad agrícola.
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Otro impacto importante para el sector es el incremento del costo logístico impuesto recientemente por las navieras, quienes anunciaron que cobrarán un recargo de US$ 1,000 por temporada alta en toda carga refrigerada enviada desde Chile y Perú hacia Asia, Europa, India y Oriente Medio. Este nuevo costo, indicaron, complica la competitividad de las agroexportaciones peruanas.
Para AGAP, esta situación refleja la mala preparación del país en gestión pública, falta de planificación y políticas deficientes.
“La mala preparación del país para enfrentar a tiempo estos riesgos son producto del deterioro de las instituciones, las malas políticas públicas, el deficiente marco legal, la corrupción y la falta de estrategias de largo plazo, males que se arrastran desde gobiernos anteriores pero que corresponde al Estado resolver con urgencia”, manifestaron.
Ante esto, AGAP exhortó al Poder Ejecutivo y al Congreso a trabajar en conjunto con el sector privado en una agenda urgente que permita solucionar los problemas estructurales del sector agrario, junto con el sector privado.
El gremio agregó que, ante su importante impacto social y económico, la agricultura peruana requiere políticas públicas efectivas que impulsen su sostenibilidad y competitividad en beneficio de todos los peruanos.
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