El dinámico sector inmobiliario peruano continúa evolucionando, adaptándose a las crecientes expectativas de los compradores. Un reciente estudio revela que los proyectos de inmobiliarias certificadas presentan tasas de venta y valorizaciones significativamente superiores al promedio.
Con base en cifras evaluadas por la certificadora Best Place to Live, los proyectos que contaron con la certificación se vendieron, en promedio, un 26.4% más rápido que el resto del mercado, entre 2021 y el primer semestre de 2024. Este resultado, reflejado en el ratio venta/oferta, demuestra la alta demanda y el atractivo de estos desarrollos, consolidando su posición como líderes en el sector, destacó la certificadora.
“La tendencia actual del mercado inmobiliario peruano muestra que los compradores valoran cada vez más la calidad, la recomendación de otros clientes y las propuestas de valor diferenciadas que ofrecen las inmobiliarias con certificación. Este comportamiento refuerza las expectativas de crecimiento, apalancadas por la mejora económica y la continua urbanización,” comenta Cinthia Pasache, gerente comercial de Best Place to Live.
Señala también que los factores que han influido en la estabilidad del ratio venta/oferta incluyen una estrategia de mercado eficiente, una buena reputación y una oferta atractiva. “Las inmobiliarias certificadas por Best Place to Live han logrado captar la atención y el interés de los compradores más rápidamente, gracias a campañas de marketing efectivas, ofertas especiales y un servicio al cliente excepcional. La calidad y el diseño de sus proyectos cumplen o superan las expectativas, lo que se refleja en un ritmo de ventas más rápido,” explica Pasache.
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Además, los precios de los inmuebles certificados alcanzaron un 9.5% por encima del promedio del mercado en el primer semestre de 2024. Este incremento sugiere que los compradores reconocen y están dispuestos a pagar un precio mayor al tratarse de inmobiliarias que superan el estándar de satisfacción de sus clientes.
Aunque el ratio venta/oferta ha disminuido al 15.3% en el primer semestre de 2024, desde el 19% registrado en 2023, sigue siendo positivo, lo que indica que los proyectos de Best Place to Live aún venden más rápido que la mayoría de la oferta en el mercado, refirió la empresa. Esto puede deberse a la capacidad de adaptar precios, promociones y estrategias de venta rápidamente en respuesta a las condiciones cambiantes del mercado. “Las inmobiliarias BPtL están enfocadas en nichos de mercado específicos y diversificadas en términos de ubicación y tipo de proyectos, lo que ayuda a mantener la demanda en diferentes mercados locales”, detalla Pasache.
En cuanto a la disposición de los compradores a pagar un precio ligeramente superior cuando su experiencia de compra es positiva, Pasache menciona que factores como una experiencia de compra mejorada, la calidad de construcción y diseño, y la ubicación y amenidades de los proyectos juegan un papel crucial. “Una experiencia de compra positiva, que incluya un servicio al cliente excepcional, claridad en la información del proyecto y facilidades de pago, puede aumentar la disposición de los compradores a pagar más. Además, los proyectos que ofrecen características innovadoras y sostenibles, personalización y flexibilidad, y una mayor seguridad y sentido de comunidad, son percibidos como de mayor valor,” concluye Pasache.
La evaluación en Perú es realizada por Inteligencia y Data Capeco, una empresa formada por Capeco (Cámara Peruana de la Construcción) y TGA, una Proptech chilena con presencia en varios países de la región, como Chile, Colombia, México y Ecuador.
Pasache añade que “Obtener la certificación no es tarea fácil; es un proceso de evaluación exhaustivo que asegura que las inmobiliarias mantengan altos estándares en todas sus operaciones, incluyendo el producto y el servicio. Los criterios evaluados incluyen la satisfacción del cliente, la transparencia en los procesos de venta, y la calidad de los proyectos inmobiliarios.”
Sobre Best Place to Live. Es la certificación internacional que reconoce a las mejores inmobiliarias o constructoras en cada país, en base a la satisfacción de sus compradores. El sello de calidad inmobiliaria se basa en la opinión de compradores reales, indica la certificadora.