Un crédito hipotecario no impone que se mantenga la tasa de interés rígida a lo largo de los años de la deuda. Alfredo Ramírez, CEO de Comparabien.com, y Jorge Carrillo Acosta, profesor de Pacífico Business School, comentan sobre ello.
Según Ramírez, las personas que mantienen un crédito de este tipo puede concertar una reunión con la entidad financiera a cargo de su deuda con el fin de solicitar la reducción de la tasa de su crédito. Sin embargo, para que esta reunión adquiera sentido tiene que haber sustento o razones que puedan “sostener” la solicitud.
Estas están relacionadas con la presentación de mejores ingresos y el que se tenga un buen comportamiento de pago (es decir, que sea un buen pagador), no solo en el crédito hipotecario, sino en el resto de sus deudas si las tuviese.
“Estas son señales que necesita la entidad financiera para que se pueda hacer el análisis y, en el mejor de los casos, se pueda reducir la tasa”, indicó.
En la misma línea, Carrillo, menciona que es recomendable tener constancias de nuevas fuentes de ingresos y un historial crediticio bueno de por lo menos 12 meses, pues son criterios básicos para este tipo de solicitudes.
¿Y si no me reducen la tasa?
Según Carrillo, el que la entidad financiera no reduzca la tasa de interés luego de la solicitud es altamente probable; sin embargo, existe la opción de compra de deuda por parte de otra entidad financiera que otorgue estos créditos.
“Es muy común que estas peticiones sean rechazadas. Por ello, muchas personas optan por hacer una especie de subasta de su deuda, en donde visitan distintas entidades en busca de una mejor tasa. Es usual que, cuando esto ocurre, la entidad original iguale la oferta del potencial comprador de la deuda, para no perder al cliente”, indicó .
Ramírez por su parte menciona que las entidades financieras ofrecen la compra de deuda como opción para algunos clientes de otras entidades, representando así una oportunidad para comparar con la tasa actual, y la que ofrecen otras entidades.
“Lo que hoy día es una buena tasa, no siempre es así dentro de unos años. Por ello, es importante estar investigando sobre estos temas y qué opciones hay en el mercado ”, señaló.
¿Y los plazos?
En cuanto a los plazos, señaló Carrillo, es probable que se den opciones de ampliación o se mantengan con el periodo que resta del pago del crédito. No obstante, esto depende de la edad del solicitante y también del seguro de desgravamen que se use en el crédito.
¿Qué pasa si aún no tengo un crédito?
En este caso, Ramírez afirma que para optar por un crédito hipotecario y una tasa competitiva es importante tener un historial crediticio, usar productos financieros como tarjetas de crédito y tener un buen récord de pagos.
Asimismo, el que se adquiera más de un producto en la entidad financiera, por ejemplo cuenta sueldo o CTS, podría ser relevante para que se tenga mayor preferencia al momento de solicitar el crédito.
Respecto al análisis de la entidad a elegir, es importante no solo tener en cuenta la tasa efectiva anual (TEA), sino aquella que incluye los costos regulares de un crédito, que es la tasa costo efectivo anual (TCEA). Esta incluye costos como el seguro de desgravamen.
¿Qué es el seguro de desgravamen?
El Seguro de Desgravamen, según la SBS, tiene por objeto pagar, si fallece el deudor, la deuda a la entidad del sistema financiero acreedora, beneficiándose de esta manera sus herederos, quienes se verán liberados de la obligación del pago del crédito.