
Un grupo de inversionistas e hinchas de Alianza Lima consiguieron comprar la deuda del club en 2019.
De ese modo, se constituyó el Fondo Blanquiazul. Anteriormente, se ha cuestionado la injerencia del Grupo Coril en el mismo, ¿qué puede decir el holding al respecto?
“Nosotros como Grupo Coril no participamos en el fideicomiso del Fondo Blanquiazul. Eso es un fideicomiso como cualquier otro que se maneja con base al contrato que en su oportunidad inicial fue firmado, que establece los términos y condiciones, ahí y lo único que se hace es administrar”, dijo Rodolfo Weiss, presidente del holding en entrevista con Gestión.
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“La empresa de titulización o de fideicomiso, según sea el caso, es simplemente un administrador de lo que originalmente se pactó. Y si hay un cambio, se hace con acuerdo de todas las partes. Nosotros no participamos directamente en ese fondo”, añadió.

Un fideicomiso es un contrato legal donde participan tres partes. Por un lado, el fideicomitente, que entrega los bienes (puede ser dinero); el fiduciario, que administra esos activos; y el beneficiario, que es en favor de quien se gestionan los bienes.
El fideicomitente entrega los bienes o recursos, que pasan a constituir un patrimonio autónomo, y el fiduciario deberá administrarlo con un objetivo o mandato específico.
En el caso del Fondo Blanquiazul, según explica Weiss, ellos cumplen el rol de fiduciarios.
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Grupo Coril no solo tiene actividad en el mercado de fideicomisos, a través de Corfid, sino que posee otras cuatro líneas de negocio: la sociedad agente de bolsa, la titulizadora, la sociedad administradora de fondos y el banco, Alfin Banco.


Economista con trayectoria en periodismo y medios digitales.








