Los tiempos de entrega para los chips aumentaron en diciembre, lo que indica una persistente escasez de componentes que ha golpeado durante meses el crecimiento en diferentes industrias.
Los plazos de entrega, una brecha observada de cerca entre el momento en que se solicita un semiconductor y el momento en que se entrega, aumentaron el mes pasado en seis días a aproximadamente 25.8 semanas en comparación con noviembre, según una investigación de Susquehanna Financial Group.
El retraso marca el tiempo de espera más largo desde que la empresa comenzara a rastrear los datos en el 2017.
Susquehanna cambió recientemente el método que usa para calcular los tiempos de entrega, agregando más fuentes de datos y revisando sus estimaciones anteriores basadas en el nuevo sistema.
Actualmente, empresas que van desde Apple Inc. hasta Ford Motor Co. están perdiendo miles de millones de dólares en ingresos porque no pueden obtener un suministro consistente de semiconductores que satisfaga la demanda de sus productos. El impulso para obtener componentes también está aumentando los costos, dijeron las empresas.
“La tasa de expansión del tiempo de entrega ha sido irregular, pero repuntó nuevamente en diciembre”, dijo este martes en una nota de investigación Chris Rolland, analista de Susquehanna. “Los tiempos de entrega para casi todas las categorías de productos fueron testigos de máximos históricos, con la administración de energía y las MCU (microcontroladores) liderando la carga”.
En el pasado, la extensión de los plazos de entrega ha ido seguida de dolorosos períodos de exceso de oferta. La preocupación ahora es que los clientes intenten comprar más de lo que necesitan en un intento por asegurarse de obtener chips para luego cancelar las solicitudes, lo que la industria llama doble orden.
Si bien los tiempos promedio se estiraron nuevamente, algunos proveedores importantes están entregando productos a sus clientes de manera más oportuna, mostró la investigación. Los plazos de entrega de Broadcom Inc. “cayeron modestamente” a 29 semanas en diciembre, según el informe.