Las autoridades chinas emitieron un nuevo código de conducta que incluye 31 “malos hábitos” que los influencers del país asiático deben evitar, informaron varios medios locales.
Entre las normas destaca la prohibición de difamar la cultura china, figuras históricas y héroes nacionales, o evitar la promoción de temas considerados delicados.
Las medidas buscan un ciberespacio “saludable”, o, en otras palabras, expandir su modelo de control de Internet en una industria en auge.
Para “profesionalizar” el sector, los presentadores deberán obtener calificaciones acordes a su rol, aunque ya desde principios de este año se exige a las principales plataformas de transmisión en línea una serie de requisitos al respecto.
El código, que fue publicado por la Administración Nacional de Video y Televisión de China y el Ministerio de Cultura y Turismo, incluye 18 artículos entre los que se describen las mencionadas “conductas prohibidas”.
La protección de los menores en la red es otro de los objetivos marcados con la publicación de estas normas, ya que los ‘streamers’ tendrán prohibido inducir a los usuarios menores a dar pistas sobre su identidad, declaró la administración.
Los presentadores en vivo también deberán declarar sus ingresos y pagar impuestos de acuerdo con la ley para así evitar casos como los de la famosa presentadora de eventos en línea Huang Wei, que el pasado diciembre recibió una multa por valor de 1,341 millones de yuanes (US$ 203 millones, 180 millones de euros) por evasión fiscal.
Anteriormente, el presidente chino, Xi Jinping, había pedido regular y ajustar los ingresos “excesivamente altos” e “irracionales” y alentado a “individuos y a empresas” a que “devolviesen más a la sociedad”, en línea con el concepto de “prosperidad común” fomentado por Pekín desde hace unos meses.
Estas medidas acompañan a las que aparecen en el borrador de ley elaborado y presentado la semana pasada por la Administración del Ciberespacio de China, con el que buscan regular los servicios de redes sociales y las plataformas de vídeo para que revisen los comentarios escritos por los usuarios antes de que se publiquen.
China es el país con más internautas del mundo (alrededor de 700 millones) pero a la vez uno de los que ejercen mayor control en los contenidos de la web, como muestra el hecho de que populares webs como Google, Facebook, Twitter o YouTube están bloqueadas en el país desde hace años.