Con la presencia de Jaime Fernández-Cuesta, Presidente Ejecutivo de REPSOL Perú, y la viceministra de Hidrocarburos, Iris Cárdenas, REPSOL inauguró la ampliación de su Unidad de Gasolinas, ubicada en la Refinería La Pampilla, distrito de Ventanilla. El proyecto tuvo el nombre de RLP-53 y significa una importante ampliación de las plantas de producción de combustibles de bajo azufre, que ahora permitirá a REPSOL incrementar su producción en un 20%.
Con una inversión de S/160 millones, es el resultado de años de planificación que iniciaron en el 2019, un año después de que REPSOL implementó las primeras unidades de producción de gasolina bajas en azufre en La Pampilla. Durante la ceremonia de inauguración, Julián de la Calle, Director de Refino de REPSOL Perú, resaltó este trabajo y el compromiso en sostenibilidad que asumió la empresa en 2016, cuando puso en marcha la planta de producción de diésel bajo en azufre, la primera en su tipo en el país.
“Lo que ha ocurrido con los años es un incremento de la demanda. Ahora con la ampliación, logramos producir 18 mil barriles de gasolina para el mercado peruano al día. Eso asegura una mejor garantía de suministros al consumidor porque hace que dependamos menos de las importaciones”, contó Luis Vásquez, Director de Comunicaciones y Relaciones Institucionales de REPSOL Perú.
El proyecto de ampliación RLP-53 es la continuación de una iniciativa que Repsol inició en el 2016 con la planta de producción de diésel bajo en azufre, la primera de su tipo que tuvo el país.
Logro significativo
En la ceremonia de inauguración también estuvieron presentes importantes inversionistas del sector energético y stakeholders de la empresa, quienes celebraron la ampliación de la Unidad de Gasolinas al ser un hito importante para el sector. Al respecto, Iris Cárdenas, viceministra de Hidrocarburos, durante su presentación resaltó la importancia del proyecto RLP-53 como un logro significativo en el marco de la política energética del Gobierno, que promueve el desarrollo y fortalecimiento de la institucionalidad del sector con el desarrollo y uso de energías limpias con bajas emisiones contaminantes.
“Con este proyecto, La Pampilla mejora y contribuye a la seguridad y sostenibilidad en las plantas de producción, marcando un hito en la producción de combustibles menos contaminantes y eficientes en el Perú. Sigamos adelante con determinación y visión hacia un futuro energético más brillante y próspero para todos”, declaró la viceministra de Hidrocarburos.
Trabajo continuo
El proyecto de ampliación también se realizó en conjunto con la parada plurianual de La Pampilla, un proceso que consiste en el mantenimiento de todas las instalaciones y que tuvo la participación de más de 40 empresas contratistas. Para realizarlo, REPSOL tuvo que detener casi la mitad de las unidades de proceso en la refinería. Solo de esa manera pudo realizar las modificaciones necesarias para garantizar la confiabilidad de las instalaciones para el siguiente ciclo productivo y continuar la producción de combustible de bajo azufre.
Al respecto, Luis Vásquez destacó que tanto la ampliación como el mantenimiento mejoran la eficiencia y, además, garantizan la rentabilidad de la operación y de los stakeholders. “Estamos apostando por proyectos y tecnologías de bajas emisiones que mejoran la eficiencia de la planta. El tema del cambio climático es uno que nos involucra a todos. Solo así lograremos la meta que hemos asumido en REPSOL de ser neutrales de carbono para el año 2050. Todas las empresas debemos estar alineadas con ese objetivo”, finalizó.
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