¿Y qué le dirías a alguien que siente que nada le sale como quiere? Tu tienes tus planes, pero la vida te da otros. Sí, le diría eso, tú tienes tus planes, pero la vida te da otros.
Soy abogado, queriendo ser químico. Estudié derecho mientras practicaba periodismo radial con la idea de dedicarme a diplomático. Al poco tiempo de empezar a trabajar descubrí el mundo de la empresa. Hice un MBA para centrarme en la empresa, y encontré lo fascinante que es el Marketing. Empecé a trabajar en Banca sin buscarlo. Luego me alcanzó la experiencia digital. Estudié un diploma en marketing digital y adapté mi experiencia en banca a la realidad digital. Pregunta a más personas. Verás que muchos tienen una historia parecida.
Tuve mis planes, claro que los tuve. Pero la vida me dio otros. Adaptarse es la palabra.
¿Quién de nosotros tuvo en sus planes el COVID?
La que empezaba a estudiar su carrera tuvo que iniciar la universidad desde el comedor de su casa. El que viajó de vacaciones y se quedó trabajando vía on line desde otro lugar. Y muchos ejemplos más. Adaptarse, es la palabra.
Una amiga, a sus 85 años me contó su visión de la vida. Me dijo que somos cómo una hormiga en el suelo que ve un árbol y quiere llegar a lo alto. Entonces traza su plan y empieza a subir. Y en el camino encuentra dos ramas que se abren. Pero ya no está en el suelo para mirar cuál de las dos la lleva hacia arriba. Y tiene que elegir. Y elige. Hasta que se encuentra otra vez con dos ramas. Y se repite la situación. Y se repite varias veces. Elegir, adaptarse, volver a elegir. Descubrir que te equivocaste de rama, regresar. Volver a elegir. Volver a adaptarte.
Cada uno de esos momento puede ser una frustración o una alegría. Puedo sentir que nada me sale como quiero o que he ganado experiencia y ahora tengo una nueva oportunidad. Porque cada rama mal elegida es experiencia adquirida.
Lo que no dijo mi amiga es que las hormigas son muy listas. Cuando caminan siempre que se encuentran con otra hormiga que ya regresa, se tocan las antenas y se pasan información. Seguro lo has visto muchas veces.
También en ese árbol que es la vida hay personas que ya recorrieron esa rama y están de regreso. Pero no siempre paramos a preguntarles. Parar y preguntar no es perder tiempo. Es ganarlo.
Así que cuando creas que nada sale como quieres, para y pregunta. Adáptate a la nueva situación. Sonríe por la experiencia ganada y la nueva oportunidad.
Porque tu tienes tus planes, pero la vida te da otros.