Al cierre de la edición, dos candidatos presidenciales se posicionaban como favoritos para pasar a una segunda vuelta electoral. Se trata de Pedro Castillo (Perú Libre) y Keiko Fujimori (Fuerza Popular).
Precisamente, estas dos agrupaciones ya empezaron a conversar con otros partidos con la finalidad de formar alianzas de cara a este tramo final de la contienda.
En diálogo con Gestión, Ernesto Bustamante informó que Fuerza Popular ya ha tenido conversaciones iniciales con Avanza País, liderado por Hernando de Soto, y Renovación Popular, de Rafael López Aliaga.
“Bueno, por supuesto que vamos a conversar (con Renovación Popular y Avanza País). De hecho, ya se está conversando con ellos (…) hay afinidad y discrepancias, pero sobre todo está por delante los intereses del país”, anotó.
El virtual congresista dijo que se trata de conversaciones informales; sin embargo, descartó que se vaya a formar una alianza en concreto con estos grupos, debido a que eso implicaría compromisos y acuerdos.
“Estamos conversando de manera informal. Yo tengo amigos en dichos partidos y se conversa. Son simples coqueteos con la intención de luchar contra la izquierda. El apoyo tiene que venir solo, y como te digo, aquí se trata de o bien apoyas la izquierda radical o estás en contra de ella. Aquí no hay alternativas, no hay otra opción. Las cosas están claras”, enfatizó Bustamante, tras precisar que son varias las personas que están involucradas en estos diálogos, pero evitó dar sus nombres.
Temas innegociables
En otro momento, Bustamante no descartó la posibilidad de que su agrupación elabore un documento con los principales temas que impulsarán en el próximo Congreso.
“Lo que vamos a hacer es que el Congreso funcione y obviamente al ser una bancada no mayoritaria necesitaremos hablar con otras bancadas, para poder buscar soluciones posibles”, anotó el fujimorista.
En ese sentido, dijo que la futura bancada tendrá una actitud más concertadora; sin embargo, recalcó que hay algunos temas que no serán negociables.
“Hay algunas cosas que se pueden concertar y otras que no pueden ponerse en la mesa, como por ejemplo, el cambio del capítulo económico de la Constitución o la convocatoria a una Asamblea Constituyente. Esas son cosas que no se pueden aceptar”, apuntó.