El Ejecutivo declaró este miércoles el estado de emergencia en 138 distritos de algunas provincias de 10 regiones del país, en los que se incluye Lima y el Callao, por peligro inminente ante intensas lluvias (2023-2024), y el posible Fenómeno El Niño. La medida se toma en base a pronósticos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) y reporte del Centro de Estimación Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred).
De acuerdo con el Decreto Supremo 121-2023-PCM, publicado hoy en el Boletín de Normas Legales del diario El Peruano, la medida rige por el plazo de 60 días calendario.
Los más de 130 distritos de algunas provincias pertenecen a las siguientes regiones:
- Amazonas
- Áncash
- Apurímac
- Ayacucho
- Cajamarca
- Huancavelica
- Ica
- La Libertad
- Lima (Yauyos - Callao)
- Pasco
La medida tiene como objetivo la ejecución de medidas y acciones de excepción, inmediatas y necesarias, para la reducción del muy alto riesgo existente frente a dicho evento climatológico, así como aquellas de respuesta y rehabilitación que correspondan.
Los gobiernos regionales de las regiones consideradas en el estado de emergencia, así como los gobiernos locales comprendidos, con la coordinación técnica y seguimiento del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) y la participación del Ministerio de Salud, Ministerio de Educación, Ministerio de Vivienda, Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, Ministerio de Transportes, Ministerio de Trabajo, Ministerio del Interior, Ministerio de Defensa, y demás instituciones públicas y privadas involucradas, ejecutarán las medidas y acciones de excepción requeridas.
Los distritos a ser intervenidos se encuentran detallados en el anexo que forma parte del decreto supremo que mostramos a continuación:
¿Cuáles son las recomendaciones ante intensas lluvias?
El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) exhortó a la población y a los gobiernos regionales y locales a seguir una serie de recomendaciones sobre medidas de prevención frente a la ocurrencia de intensas lluvias.
Entre las recomendaciones destaca la ejecución de inspecciones técnicas de seguridad en edificaciones para asegurar el diseño correcto de las infraestructuras.
Asimismo, vigilar de forma permanente el caudal de ríos y quebradas, evitando cruzarlos en caso aumente su caudal, además de verificar y garantizar que la población se aleje de las riberas.
La entidad consideró que la presencia de las lluvias tiene también aspectos positivos, como ser favorable para el aprovechamiento de la agricultura, acumulación de agua para reservorios, acumulación a la napa freática para agua subterránea, especialmente en aquellas localidades que presentan déficit hídrico o ausencia de precipitaciones.