La Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) contrató a tres proveedores (de un total de 11) que no acreditaron la experiencia mínima exigida para el servicio de limpieza y desinfección de vehículos de transporte urbano para evitar contagios por COVID-19, así lo determinó la Contraloría General de la República luego de la auditoría de cumplimiento realizada a dicha entidad.
El monto contratados sin cumplir el requisito solicitado por un valor de S/ 1′184,200.80, que según el Informe de Auditoría de Cumplimiento N° 011-2020-2-6402-AC, este hecho ocasionó que los servicios proporcionados por estos tres proveedores se realicen sin cumplir las condiciones establecidas y el protocolo de limpieza y desinfección previsto, para prevenir la propagación del COVID-19 entre los usuarios de los buses de transporte público convencional, Corredores Complementarios y el Metropolitano.
Sin experiencia
La Contraloría detalla que, los tres proveedores en cuestión debían tener una experiencia mínima de tres años, sin embargo, solo acreditaron entre 2 años 7 meses y un año 7 meses, tal como lo determinó la auditoría al procedimiento de contratación del servicio para la limpieza y desinfección del transporte urbano para Lima y Callao.
“A esto se suma que en las visitas de control realizadas a la labor de estos tres proveedores se advirtieron incumplimientos tales como tener operarios con trajes rotos, limpieza incompleta de buses, no uso del alcohol, entre otros lineamientos de bioseguridad que según las especificaciones técnicas debían cumplir los proveedores”, sostienen.
Estos incumplimientos ratifican los resultados obtenidos previamente en el marco del control simultáneo realizado por la Contraloría del 28 de abril al 14 de mayo, a un total de 100 plantas (paraderos) donde se realizaba la limpieza y desinfección de las unidades de transporte público y donde se verificó que dichos servicios incumplieron las obligaciones contractuales, como la adecuada limpieza de buses, el equipamiento del personal, insumos sin rotulado, entre otros.
El segundo hallazgo de la auditoría fue que la ATU emitió una certificación de crédito presupuestario para la contratación del servicio de limpieza y desinfección por un monto de S/ 42 918 671.01 pero dicha cifra refleja un exceso de S/ 284 643.20 debido a errores de cálculo en la determinación del valor estimado del servicio para algunos buses de transporte convencional y del Metropolitano.
Esta situación ocasionó una mayor asignación de recursos presupuestales (S/ 42 918 671.01) a la entidad en relación a los recursos que realmente necesitaban (S/ 42 634 027.81).
Deficiencias en adhesivos para paraderos
Por otro lado, la Contraloría recomendó, mediante Informe de Orientación de Oficio N° 013-2020-OCI/6402-SOO, tomar acciones para corregir los incumplimientos de los proveedores detectados en la Contratación Directa N° 03-2020 realizada por la ATU, suscrita el 10 de junio por S/ 210,000, para la impresión y pegado de 20,000 adhesivos que promuevan el distanciamiento social en los paraderos de transporte público para evitar contagios por COVID-19 entre los usuarios.
El informe advierte que, entre otros aspectos, a dos meses de haberse pegado las señales en los paraderos de transporte, de la muestra verificada en campo, el 27% (316) están despegándose y el 5% (60) se encuentran rotas, lo que pondría en riesgo que estas se despeguen completamente o sean desechadas, lo que compromete la efectividad en las medidas de distanciamiento social para prevenir el contagio del COVID-19. Ello a pesar que en los términos de referencia del servicio se establece el uso de pegamento de alta duración y el empleo de laminado de alto tránsito.
Finalmente, el contrato suscrito establece la impresión y pegado de 20,000 adhesivos, pero la entidad reportó que la cantidad de señales pegadas por parte del proveedor asciende a solo 5,950, lo que equivale al 30% del total y el saldo de 14,050 unidades (70%) fue entregado a la ATU para ser guardado en su almacén. La comisión de control recordó que los términos de referencia de la contratación establecen que el pegado forma parte de un solo costo del servicio.