José Aguilar R., Presidente ejecutivo de ATU
Alejandro, chef, 29 años, salía como todos los días de su trabajo en la avenida Brasil. Mientras cruzaba la pista para regresar a su casa, probablemente soñaba con poner su propio restaurante, seguir el ejemplo de nuestros grandes chefs y, quizás, algún día ser uno de ellos. Todos esos sueñosterminaron cuando un vehículo de transporte informal se cruzó la luz roja, lo atropelló y lo mató en segundos.
Según datos del Observatorio Nacional de Seguridad Vial (ONSV), en la av. Brasil en el período 2021-2022, el 64% de los accidentes fueron causados por el transporte público, siendo el exceso de velocidad (provocado por la competencia de pasajeros) la principal causa de estos accidentes.
Las causas de un problema generalmente son varias y tienen varios actores involucrados. En este caso específico, para evitar o reducir accidentes de tránsito se necesita la participación no solo de la ATU, sino, por ejemplo, de la Policía Nacional del Perú y de las municipalidades correspondientes.
Nosotros como ATU tenemos como responsabilidad organizar, implementar y gestionar el Sistema de Transporte de Lima y Callao. Desde que he iniciado mi gestión, hemos retomado la Reforma del Transporte que ha estado paralizada por mucho tiempo. Un primer paso ha sido iniciar el retiro de combis y cústers en distintos puntos, como en las avenidas Brasil y La Marina, y estamos trabajando en la optimización de rutas.
Con este sistema se reducirá la accidentabilidad lo que, según nuestros cálculos, traerá consigo un beneficio estimado en S/ 1.8 millones por año. La reducción de la congestión vehicular, por su parte, implicará un beneficio estimado en S/ 85.2 millones por año.
Mientras tanto, estamos trabajando en optimizar más de 400 rutas, apostando por la macromovilidad, con buses con GPS y con más mecanismos de pagos. Este punto es sumamente importante, dado que un solo bus formal de 12 metros puede transportar de forma segura y asequible a 80 limeños y chalacos. Su contraparte, el informal que es más caro, menos seguro y más contaminante, para llevar la misma cantidad de personas, necesita de más de 20 vehículos, lo que nos genera más congestión y menos tiempo para disfrutar de nuestras familias. Así pues, coexistirán las rutas convencionales debidamente autorizadas con las rutas concesionadas (Metropolitano y corredores).
La explosión demográfica de Lima ha causado el nacimiento de un transporte desordenado, caótico, para cubrir la demanda urgente de nuestros ciudadanos. Es lógico: cuando hay demanda compulsiva, hay oferta desordenada si es que el Estado no interviene para ordenar y regular el mercado.
Varias ciudades en la región, con sistemas de transportes más ordenado, como Santiago, Guayaquil, Quito y Bogotá, han aplicado un sistema mixto en donde coexisten las empresas privadas y concesiones trabajando coordinadamente. Los objetivos son comunes, ¿por qué entonces tendrían que pelearse?
Eso es lo que estamos tratando de cambiar en esta nueva gestión de la ATU. Para que en nuestra ciudad no se siga perdiendo tiempo, dinero y esfuerzos. Pero lo más importante, lo que no se puede valorizar, lo que no tiene precio y es nuestro principal objetivo: tener más tiempo con nuestros seres queridos y evitar pérdidas humanas, nuestro mejor capital.
Así como Alejandro tenía un sueño, nosotros también tenemos uno: que un día, no muy lejano, todos los “Alejandros” de nuestra ciudad puedan llegar a casa, utilizando el transporte público urbano de forma rápida y segura para cumplir con los suyos.