Funcionarios de salud europeos advirtieron que la nueva variante del coronavirus Pirola, altamente mutada, está circulando en el continente y puede estar detrás de un aumento en los casos de COVID-19.
La cepa, oficialmente llamada BA.2.86, se detectó esporádicamente durante agosto y podría ser un factor en el reciente aumento notable de infecciones, dijo en un comunicado el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés).
Los funcionarios de Europa y otros lugares están alentando a los países a intensificar sus esfuerzos de vacunación COVID, especialmente para personas con riesgo de enfermarse gravemente, a medida que se acerca el otoño y el invierno en el hemisferio norte.
LEA TAMBIÉN: El COVID ha vuelto. ¿Quién tiene más probabilidades de padecerlo otra vez?
Hasta ahora, no hay evidencia de que las variantes emergentes estén asociadas con una enfermedad más grave o una reducción de la eficacia de la vacuna, dijo la directora del ECDC, Andrea Ammon, en el comunicado.
Aun así, el reciente aumento de infecciones se produce en un momento en el que se incrementan los viajes y las reuniones de muchas personas, y coincide con informes de una disminución de la protección inmunológica contra la infección, dijo la agencia.
Europa también ha visto una caída en los esfuerzos de vigilancia COVID este año, lo que podría dificultar que los responsables políticos respondan rápidamente a las amenazas emergentes del virus.
LEA TAMBIÉN: COVID-19: ¿vacunas bivalentes están dentro del tiempo de vida útil? Esto dice el Minsa
Los científicos están observando de cerca la nueva cepa porque tiene muchas mutaciones nuevas, lo que aumenta la posibilidad de que pueda propagarse fácilmente.
Sin embargo, es demasiado pronto para saber qué tan transmisible es o si produce síntomas más graves que las variantes más antiguas, según un comunicado de la semana pasada de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
LEA TAMBIÉN: Ministro de Salud: Más de 60 pacientes mueren por COVID-19 a la semana