Los europeos y sus aliados están dispuestos a imponer más sanciones contra Rusia, indicó la presidencia francesa, tras una videoconferencia entre los dirigentes francés, estadounidense, británico, alemán, italiano, japonés, polaco, rumano y representantes de la Unión Europea (UE) y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
“Se tomarán otras sanciones, eso es una prioridad”, y estas podrían adoptarse “en los próximos días” pues “es urgente aumentar el coste de la guerra para el presidente [Vladimir] Putin”, indicó una fuente de la presidencia francesa, considerando que las sanciones tomadas hasta ahora “hacen más daño de lo que el presidente Putin había anticipado”.
Las medidas serán “de diversa importancia”, como la posibilidad de apuntar a nuevos bancos, a otros oligarcas o incluso al fondo soberano ruso, según esta fuente.
“Hay cierta reserva, todavía tenemos mucho margen de maniobra”, comentaron los consejeros del Palacio del Elíseo -sede de la presidencia francesa-, tras la videoconferencia.
Rusia “está preocupada por la fuga de capitales” y Vladimir Putin “no esperaba que las sanciones fueran tan perjudiciales”, según París.
Pero los países occidentales y sus aliados señalan un “potencial muy fuerte de escalada” con riesgos para los civiles y de “que Rusia tome el control de todo el territorio ucraniano”.
Según la presidencia francesa, “Europa tendrá que revisar sus perspectivas para aprender las lecciones de una crisis que corre el riesgo de separar a Rusia del resto del continente europeo a largo plazo”.
Sin embargo, Francia sigue siendo cautelosa sobre la posible adhesión de Ucrania a la UE. “Tengan cuidado de no hacer promesas que no podamos cumplir”, advirtieron los asesores, refiriéndose al dilema que se plantearía “si Ucrania fuera conquistada por Rusia”.