El Gobierno británico amplió el martes sus sanciones contra Rusia en respuesta a la invasión de Ucrania, incluyendo unos 350 individuos más e imponiendo aranceles punitivos a productos como el vodka y prohibición de exportar bienes de lujo.
Buscando incrementar la presión económica sobre el régimen del presidente Vladimir Putin y los multimillonarios rusos que lo apoya, el ejecutivo de Boris Johnson agregó 350 nuevos nombres a la lista de individuos sancionados -51 de los cuales son oligarcas y sus familiares- llevándola a 935.
Entre ellos figuran el primer ministro Mijáil Mishustin, el ministro de Defensa Serguéi Shoigu y el expresidente ruso Dmitri Medvedev, así como el secretario de prensa de Putin, Dmitry Peskov, y la portavoz del ministerio ruso de Relaciones Exteriores, María Zajárova.
A estos se suman un total de 70 empresas y filiales también sancionadas.
“Estamos yendo más lejos y más rápido que nunca en golpear a los más cercanos a Putin, desde los principales oligarcas, a su primer ministro, y los propagandistas que venden sus mentiras y desinformación. Les hacemos responsables por su complicidad en los crímenes de Rusia en Ucrania”, afirmó la ministra británica de Relaciones Exteriores, Liz Truss, anunciando las nuevas sanciones al Parlamento.
Estas sanciones, que en las últimas semanas ya habían sido aplicadas a magnates con Roman Abramovich -propietario del club de fútbol londinense Chelsea-, incluyen congelación de haberes, imposibilidad de hacer negocios con individuos y empresas británicas y prohibición de viajar al país.
El Reino Unido impuso también el martes sanciones comerciales, centrándose en el sector del lujo tan apreciado por los multimillonarios rusos, que incluye un aumento de 35 puntos porcentuales a las tarifas impuestas a productos como el vodka, la pieles de animales y metales como la plata, el aluminio, el cobre y el acero.
Por su parte, las empresas británicas no podrán exportar a ese país productos de lujo entre los que se incluyen los automóviles, las obras de arte y la moda, informó el ministro de Comercio Internacional en un comunicado.
“Nuestros nuevos aranceles aislarán aún más a la economía rusa del comercio mundial, asegurando que no se beneficie del sistema internacional basado en normas que no respeta”, afirmó el ministro de Finanzas, Rishi Sunak.
“Estos aranceles se suman a los esfuerzos del Reino Unido para impedir el acceso de Rusia a las finanzas internacionales, sancionar a los compinches de Putin y ejercer la máxima presión económica sobre su régimen”, agregó.