La Organización Mundial de la Salud (OMS) subrayó que la amenaza del Covid-19 y las necesarias medidas de confinamiento contra la pandemia están causando un fuerte impacto psicológico en las sociedades que no debe ser olvidado en la actual crisis y ha de ser atendido con medidas “imaginativas”.
"El aislamiento, el distanciamiento físico, el cierre de escuelas y lugares de trabajo, son desafíos que nos afectan, y es natural sentir estrés, ansiedad, miedo y soledad en estos momentos", subrayó al respecto el jefe de la OMS para Europa, Hans Kluge.
Uno de los colectivos más afectados son los trabajadores sanitarios, que son también uno de los grupos de mayor riesgo ante la actual pandemia (uno de cada 10 infectados en Europa pertenece a ese sector), por lo que la OMS aconsejó medidas para apoyarles psicológicamente en este momento de dificultad.
Entre ellas, cambiar turnos en las posiciones de mayor estrés, incrementar la comunicación entre los equipos de trabajo, contar con personal de equipo psicosocial en los hospitales y asegurarse de que los trabajadores en primera línea tienen amplia experiencia, subrayó la experta en salud mental de la OMS Aiysha Malik.
Otros colectivos a tener en cuenta en cuanto a impacto psicológico son las embarazadas, los mayores o los niños, añadió Malik, señalando que los más pequeños "pueden experimentar ansiedad al ver que un familiar fallece o debe recibir tratamiento", por lo que quienes les rodean deben prestarles especial atención y "ser honestos con ellos".
La experta también advirtió que el mayor tiempo en casa de algunos niños en hogares en los que existen problemas de convivencia familiar los hace aún más vulnerables.
Malik subrayó el riesgo de recaída que estos momentos de aislamiento y estrés producen en personas con adicciones, por lo que transmitió el mensaje de que acudir al alcohol, las drogas o el juego para afrontar estas dificultades "sólo puede empeorar las cosas".
Los expertos de la OMS enfatizaron que en general la respuesta a estos desafíos es mostrar afecto y cuidado hacia los demás tomando en cuenta las recomendaciones de distanciamiento social, y proyectando cercanía a través de una llamada telefónica, una postal o una videoconferencia.
“Es esencial que afrontemos los retos mentales que esta crisis produce en Europa y el resto del mundo, también diseminando información puntual, comprensible y veraz a todos, incluidos los más jóvenes y los mayores”, concluyó el doctor Kluge.