TV Azteca SAB declaró ante un tribunal en Nueva York que los acreedores descontentos de la emisora mexicana no pueden forzarla a la bancarrota porque la compañía no posee ni opera nada sustancial en Estados Unidos
La productora de algunos de los programas en español más populares se ha visto envuelta en batallas judiciales en Estados Unidos y México con tenedores de bonos que dicen que TV Azteca dejó de pagar más de US$ 400 millones en pagarés que vencen el próximo año. Los tenedores de bonos presentaron un caso de quiebra involuntaria contra la empresa el 20 de marzo que la obligaría a negociar un plan de pago bajo la supervisión de un juez estadounidense.
La disputa de la deuda no puede servir para que la empresa se acoja al Capítulo 11, dijo a la jueza de quiebras de Estados Unidos Lisa G. Beckerman, el abogado de la compañía, William A. Clareman, durante una audiencia el miércoles en una corte federal en Nueva York.
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La empresa “tiene miles de empleados que en su gran mayoría están ubicados en México; la gran mayoría de sus ingresos provienen de México; y su negocio depende de las licencias emitidas por el Gobierno mexicano para transmitir al aire televisión en México”, dijo TV Azteca en un expediente judicial. “México es el único país que podría considerar de manera creíble una reestructuración del negocio de TVA”.
Los tenedores de bonos Plenisfer Investments SGR SpA, Cyrus Capital Partners LP y Sandpiper Ltd. argumentan que cuando TV Azteca pidió prestados US$ 400 millones en 2017, acordó presentar disputas sobre la deuda a un tribunal estatal o federal en Nueva York. En cambio, la compañía convenció a un juez local en la Ciudad México el año pasado para suspender los pagos de intereses sobre los bonos, dijeron los acreedores en los documentos judiciales de quiebra.
La empresa, la segunda cadena de televisión más grande de México, y sus unidades “han dejado en claro que no respetan la legislación estadounidense a la que se han sometido voluntariamente”, dijo el abogado de los bonistas, Abid Qureshi, durante la audiencia.
Pagos incumplidos
Tras incumplir los pagos de los bonos en Estados Unidos, la compañía pagó por completo a sus acreedores locales mexicanos antes de que venciera su deuda, lo que le costó a TV Azteca más de US$ 200 millones, afirman los tenedores de bonos.
Los bonistas y la compañía comparecieron ante un tribunal en Manhattan para que Beckerman decidiera si ordenaría a TV Azteca cumplir con una suspensión de litigios que es rutinaria en los casos de quiebra en Estados Unidos Beckerman dijo que una demanda en México puede avanzar para permitir que se presente una apelación en el caso.
Ambas partes volverán al tribunal en las próximas semanas para que Beckerman decida si la quiebra es legítima o si debe ser desestimada.
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Las negociaciones han sido espinosas entre los acreedores y la empresa de medios, controlada por el tercer hombre más rico de México, Ricardo Salinas Pliego.
Los bonos en dólares en default, que vencían en 2024, cotizaban a 42.25 centavos el 14 de marzo, según datos de Trace.
La compañía ha dicho que está comprometida con las negociaciones con los acreedores.
Los casos de quiebra involuntaria requieren que una empresa acepte ponerse bajo protección judicial o luchar contra los acreedores en los tribunales.
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Un grupo representado por el Bank of New York Mellon presentó una demanda en un tribunal del estado de Nueva York para obligar a Azteca a pagar unos US$ 490 millones. La empresa trasladó el caso a un tribunal federal de Manhattan, donde está estancado.
La televisora no ha pagado al menos 1,320 millones de pesos (US$ 71 millones) en pagos de bonos, a pesar de que a finales de setiembre tenía 2,800 millones de pesos en efectivo, dijo Fitch Ratings en un informe en enero.
Los bonos de Total Play Telecomunicaciones, otra de las empresas de Salinas, también ha caído en dificultades, ya que los inversionistas sopesan si el proveedor de cable está gastando demasiado a medida que se acercan los pagos de la deuda.