El Instituto de Tecnología en Inmunobiológicos (Biomanguinhos), un laboratorio público de Brasil y el mayor productor de vacunas de Latinoamérica, firmó este lunes el contrato que lo convierte en nuevo miembro de la red internacional Coalición para Innovaciones para Prevenir Epidemias (CEPI).
El acuerdo fue suscrito durante la Cumbre Global de Preparación para Pandemias 2024, que comenzó este lunes en Río de Janeiro, informó Biomanguinhos, laboratorio vinculado a la estatal Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el mayor centro de estudios en salud de América Latina.
El CEPI, que reúne a fabricantes de vacunas de todo el mundo, es una red dedicada a apoyar el desarrollo y la fabricación de vacunas y otras innovaciones para combatir futuras epidemias y amenazas de enfermedades infecciosas.
LEA TAMBIÉN: EE.UU. anuncia plan con 50 países para enfrentar futuras pandemias
LEA TAMBIÉN: Puntos clave del acuerdo sobre pandemias que se negocia en la OMS
La asociación de Biomanguinhos a la red busca “impulsar significativamente los esfuerzos para el desarrollo y la producción de vacunas en América Latina y el Caribe, y para aumentar la capacidad regional de producción de inmunizantes”, según la entidad.
Para tal fin, la CEPI se comprometió a concederle US$ 17,9 millones al laboratorio brasileño para financiar sus proyectos de diversificación en el desarrollo de vacunas y su capacidad de fabricación.
Parte de los recursos serán destinados a la conclusión de la construcción en Río de Janeiro del Complejo Industrial de Biotecnología en Salud (CBS), que Biomanquinhos pretende convertir en el mayor centro de producción de vacunas de América Latina, con una capacidad para fabricar 120 millones de frascos de medicamentos por año.
Los recursos también servirán para que Biomanguinhos reduzca el tiempo necesario para validar los primeros lotes de vacunas experimentales, lo que le permitiría responder a un brote de alguna enfermedad en unos 100 días, condición necesaria para combatir futuras epidemias.
La CEPI nació en 2017 como una asociación entre organizaciones públicas, privadas, filantrópicas y civiles, y cuenta con una red específica para los países del llamado Sur Global, a la que quedó asociada Biomanguinhos.
La red regional reúne a los fabricantes de vacunas de los países del hemisferio sur y que están próximos a áreas de alto riesgo de brotes causados por amenazas de virus mortales como chikunguña, fiebre lassa, nipah y otros patógenos con potencial epidémico o pandémico que son prioridad para la organización.
Biomanquinhos es el quinto miembro de la red regional que ya cuenta con los laboratorios Serum Institute (India), Aspen (Sudáfrica), Institut Pasteur de Dakar (Senegal) y Bio Farma (Indonesia).
Según Biomanguinhos, la crisis de covid demostró la necesidad de una articulación global para enfrentar las epidemias, especialmente en Latinoamérica, región con el 8% de la población mundial, pero que registró el 25% de las muertes provocadas por la pandemia.
Según la entidad, la elevada mortalidad obedeció a la concentración de la fabricación de las vacunas en un pequeño número de países ricos, lo que dificultó el acceso de América Latina a los inmunizantes.