Uruguay y Canadá fueron los dos primeros países en legalizar el uso recreativo del cannabis, tal como Alemania planea hacerlo.
Algunos otros países que se limitaron a despenalizarlo --renunciando a la pretensión de enviar a prisión a los consumidores-- y una treintena adicional autorizó el uso médico del cannabis.
América Latina
Uruguay se convirtió en diciembre del 2013 en el primer país del mundo en legalizar la producción, la distribución y el consumo de cannabis.
Es posible conseguirlo de tres maneras: cultivarlo en casa para el consumo personal, acceder a él a través de un club de consumo o comprarlo en farmacia.
La compra es nominativa y limitada a 40 gramos mensuales por usuario.
En México, la Corte Suprema despenalizó el uso recreativo de la marihuana en junio de 2021 y en mayo del 2022 flexibilizó el criterio para su posesión.
Otros países latinoamericanos legalizaron el uso terapéutico del cannabis: Chile a finales de 2015, Colombia en el 2016, y mas recientemente Argentina y Perú.
América del Norte
Canadá se convirtió en octubre del 2018 en el segundo país en el mundo en legalizar el cannabis recreativo. La medida fue una promesa de campaña del partido liberal del primer ministro Justin Trudeau.
La legalización limita la posesión personal a 30 gramos y a cuatro plantas por casa.
En Estados Unidos, la ley federal prohíbe cultivar, vender o usar marihuana. Sin embargo, el consumo recreativo fue legalizado en 19 estados.
En octubre del 2022, el presidente Joe Biden anuló todas las condenas federales por posesión de cannabis.
Europa
Malta adoptó en diciembre del 2021 una reforma que permite la posesión de un máximo de siete gramos de cannabis y el cultivo de cuatro plantas por usuario mayor de 18 años.
Por encima de siete gramos y hasta 28 gramos, el usuario se enfrenta a una multa de 100 euros. También se prohíbe el consumo en público y el consumo ante un menor.
Luxemburgo anunció en octubre del 2021 que autorizará el consumo de marihuana en la esfera privada y su cultivo para consumo personal, una primicia en Europa donde el cannabis es ilegal.
Según el texto, que el Parlamento examinará a inicios del 2022, cada hogar tendrá derecho a cultivar cuatro plantas de cannabis.
En los Países Bajos, la posesión, el consumo y la venta al por menor de hasta cinco gramos de cannabis se tolera desde 1976 en los “coffee shops”. El cultivo y su venta a gran escala son ilegales.
Desde el 2012, una ley en tres provincias del sur prohíbe la venta a los no residentes y a los turistas.
En España, la producción para consumo personal está autorizada, pero no la comercialización y el consumo público. Esta legislación ha dado lugar a la creación de asociaciones de consumidores sin personalidad jurídica que producen cannabis para sus miembros.
Portugal despenalizó el consumo y la posesión de todas las drogas en el 2001, aunque siguen estando prohibidas. Los usuarios se exponen a una multa, que puede evitarse optando por un tratamiento contra la adicción.
África
En el 2018, la más importante instancia judicial sudafricana declaró “anticonstitucional” una ley que prohibía el consumo y cultivo de marihuana en los domicilios. Pero el consumo en público y la comercialización siguen estando prohibidos.