Trabajar como camionera no siempre ha sido fácil para Begoña Urmeneta, pero le encanta su trabajo y dice que España necesita más que nunca gente como ella, ya que Europa se enfrenta a una grave escasez de transportistas.
Esta mujer de 59 años, divorciada y madre de dos hijos, lleva 26 años conduciendo camiones de larga distancia que transportan desde pescado hasta sustancias peligrosas.
“Sí que es verdad que tienes que demostrar continuamente todo, porque yo cuando empecé. ‘Begoña es una chica, no puede llevar un contenedor, después luego, Begoña es una chica, no puede llevar un frigo porque no puede mover los palés’...”, afirmó.
“Yo es que les dejo decir que ‘Begoña no puede’, si son felices así, porque yo hasta ahora he podido, y lo que no puedo, pido ayuda”, dice Urmeneta, que es de la región de Valencia, en el este de España.
Las mujeres sólo representan el 4% de los camioneros en España, frente al 20% de los taxistas o conductores de autobús. El gobierno ha ordenado una revisión de las medidas con vistas a atraer a más mujeres y a una generación más joven a un sector en el que el trabajo puede ser físicamente exigente y a menudo solitario, ya que aleja a los conductores de su hogar y su familia durante largos periodos de tiempo.
Con una edad media de 50 años en España, Urmeneta cree que dentro de diez años podría no haber ninguno para transportar las mercancías del país.
“Cada vez hay menos camioneros, va a haber cada vez menos, y no nos damos cuenta de que esto es la punta del iceberg”, dijo que hizo junto a ella un viaje de 32 horas transportando resinas desde Torrent, Valencia, hasta Perpiñán, Francia.
Las largas horas de viaje lejos de casa no son un impedimento para Urmeneta, que mantiene un cartel en su parabrisas que dice “Mujer camionera: mi profesión, mi pasión”.
La escasez de transportistas no se limita en absoluto a España, como demuestran las interrupciones de las cadenas de suministro que se produjeron a principios de este año, cuando la economía mundial empezó a salir de la pandemia de coronavirus y los cierres que provocó.
Sólo en Europa hay un déficit de unos 400,000 camioneros, según la Asociación Europea de Transportistas por Carretera.