El mercado bursátil podría repuntar con más fuerza a finales de año tras la victoria del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales que cuando ganó la presidencia de Estados Unidos hace ocho años, según la mesa de negociación de JPMorgan Chase & Co.
“Espero que los rendimientos de 2024 sean mayores que los de 2016″, escribió Andrew Tyler, jefe de inteligencia de mercado estadounidense del banco, el lunes en una nota a clientes. Una gran ventaja para el índice S&P 500 es la debilidad fuera de Estados Unidos, con China, el Reino Unido, la UE, Canadá y México experimentando un crecimiento menor que el de entonces.
La fortaleza de las acciones tecnológicas conocidas como las “siete magníficas” seguirá impulsando los mercados de renta variable, mientras que el sector financiero será el más rentable del S&P 500 hasta finales de año. Esta afirmación se produce después de que el índice bursátil de referencia registrara su mejor semana de los últimos 12 meses, impulsado por la creencia de los inversionistas de que una presidencia de Trump será buena para las empresas estadounidenses.
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Sin embargo, la nota no especula sobre lo que ocurrirá en 2025, donde se avecinan mayores riesgos. La Reserva Federal está actuando con cautela en los recortes de tasas de interés, en parte porque muchas de las políticas de Trump, desde deportar a los trabajadores indocumentados hasta obstaculizar el comercio a través de aranceles proteccionistas, se consideran inflacionarias.
Dado que los rendimientos del Tesoro de nuevo están al alza, eso podría poner un límite a las futuras ganancias de la renta variable, ya que el S&P 500 ha subido un 50% en los últimos dos años, ha cotizado por encima de los 6,000 por primera vez en la historia, y está valorado en 23 veces las ganancias proyectadas, alrededor de un 40% más que su promedio desde el año 2000.
La mesa de operaciones de JPMorgan no está sola. Muchos profesionales de Wall Street son optimistas sobre el mercado bursátil de cara a finales de año. Parte de la razón es simplemente que las elecciones estadounidenses eliminaron un obstáculo de incertidumbre y ahora la renta variable entra en un periodo estacionalmente positivo.
El lunes, los estrategas de Morgan Stanley dirigidos por Mike Wilson afirmaron que el repunte de las acciones tras las elecciones que comenzó la semana pasada está en vías de continuar, especialmente en las acciones de los sectores financiero, industrial y de materias primas cíclicas.
En Oppenheimer Asset Management, el estratega jefe de inversiones, John Stoltzfus, elevó su objetivo para el S&P 500 a un máximo de 6,200 para finales de año. Y Julian Emanuel, de Evercore ISI, afirmó la semana pasada que el mercado alcista de valores apenas empieza.
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