Los tenedores de bonos de la provincia de Buenos Aires especulan con que ni siquiera el presidente argentino, Javier Milei, es tan despiadado como para dejar quebrar la región más rica del país.
El diferencial entre los bonos con vencimiento en 2037 y los bonos del Tesoro de Estados Unidos de plazo similar cayó por debajo de los 2,000 puntos base este mes por primera vez en dos años, un 30% menos que en octubre del año pasado. La caída refleja un movimiento similar para los bonos soberanos argentinos, cuyo diferencial sobre los bonos del Tesoro de Estados Unidos ha caído alrededor de 1,300 puntos base durante el mismo período, según datos de JPMorgan.
Esta es una apuesta de los inversores, que han rechazado los bonos de algunas provincias argentinas después de que Milei recortara drásticamente las transferencias de dinero que los Gobiernos locales reciben además de los ingresos fiscales del Gobierno central.
En el caso de Buenos Aires, esos fondos representaban el 12% de los ingresos totales de la provincia en 2023, según TPCG Valores, una proporción mayor que la de otras provincias. Y, sin embargo, los bonos subieron, ya que muchos dicen que la región que representa casi el 40% de la población nacional es demasiado grande para quebrar.
“Si las provincias más grandes dejan de pagar, se crea una gran inestabilidad que hace más difícil su agenda de reformas”, dijo Jared Lou, gestor de dinero de mercados emergentes de William Blair en Nueva York.
Los bonos a 2037 subieron hasta 45.6 centavos de dólar el 20 de mayo, desde un mínimo de 36.7 centavos el 9 de enero, antes de retroceder a 43.2 centavos el lunes, en medio de una renovada preocupación por las perspectivas de las reformas económicas de Milei. Estas preocupaciones empujaron al presidente a despedir el lunes a su jefe de gabinete, Nicolás Posse, mientras la Administración intenta sacar adelante su llamada ley bases en el Senado.
En problemas
Buenos Aires vio caer su recaudación en 1 billón de pesos (US$ 1,100 millones) en los cuatro primeros meses de 2024 con respecto al mismo periodo del año anterior. La caída se debe en parte a los recortes en las transferencias del Gobierno central y a una profunda recesión que ha mermado los ingresos fiscales, según el Ministerio de Economía provincial.
Se espera que la caída amplíe drásticamente un déficit que alcanzó los 627,000 millones de pesos en el cuarto trimestre de 2023, y se produce mientras la provincia se prepara para realizar un pago de deuda de US$ 349 millones en bonos en moneda fuerte en septiembre. Tiene otros US$ 761 millones pendientes hasta 2025, según datos compilados por Bloomberg.
Es probable que las transferencias discrecionales a las provincias sean parte de las negociaciones entre la Administración y los gobernadores locales para lograr que el Congreso apruebe la ley bases de Milei, que planea aumentar los impuestos y recortar el gasto. La idea es que con menos dinero proveniente del Gobierno central, Milei pueda influir en las provincias para que implementen sus propias medidas de austeridad.
“No creo que haya un acuerdo en el que no se reduzcan en absoluto las transferencias a las provincias”, dijo Carlos de Sousa, gestor de carteras de deuda de mercados emergentes de Vontobel Asset Management en Zúrich. “Hay una idea clara de que la carga del ajuste debe repartirse entre el Gobierno federal y los provinciales”.
Apuesta nacional
Este año, los inversores han adquirido deuda de Buenos Aires en medio de un repunte más amplio de los bonos soberanos argentinos. Desde que Milei ganó la presidencia en noviembre, esos bonos en dólares han registrado algunos de los mejores rendimientos de los mercados emergentes, proporcionando a los inversores ganancias de aproximadamente el 67%, según muestran los datos recopilados por Bloomberg.
Este repunte de la deuda soberana ha llevado a algunos analistas a afirmar que las ganancias de la deuda de Buenos Aires han ido demasiado lejos.
“Los inversores no están diferenciando estos créditos como deberían”, dijo Ramiro Blazquez, estratega de BancTrust & Co. Algunos anticipan un Gobierno más favorable a los mercados en la provincia, pero aún faltan tres años para las elecciones. “Eso significa que se puede hacer más daño”.
La provincia es gobernada por Axel Kicillof, uno de los líderes de la oposición peronista argentina que ha protestado contra el bombardeo de austeridad de Milei. Si el enfrentamiento político entre ambos se recrudece, puede hacer mella en las ganancias.
Aun así, los inversores esperan que la provincia haga frente a su próximo pago de bonos, que vence en septiembre. Un portavoz del Ministerio de Economía bonaerense dijo que las autoridades planean utilizar una combinación de fondos para cubrir las necesidades de financiación en los próximos meses, incluyendo ventas de deuda local y acuerdos de crédito con prestamistas bilaterales y multilaterales.
Ante la pérdida de fuerza de la recuperación de los mercados emergentes, algunos ven en los bonos de Buenos Aires una alternativa más barata que podría ofrecer ventajas en caso de que Milei siga avanzando en la recuperación de la economía argentina. Sus bonos rinden en torno al 17.9%, según los datos de precios recopilados por Bloomberg.
“Dados los rendimientos absurdamente altos que ofrecen los bonos de la PBA, si las cifras económicas del país siguen siendo buenas y el apetito por el riesgo en los mercados emergentes sigue aumentando, espero que estos bonos suban pronto”, dijo Hans Humes, director ejecutivo de Greylock Capital Management.
Comienza a destacar en el mundo empresarial recibiendo las noticias más exclusivas del día en tu bandeja Aquí. Si aún no tienes una cuenta, Regístrate gratis y sé parte de nuestra comunidad.