Varias figuras del Ejecutivo mostraron su preocupación por el aumento del tipo de cambio y pusieron el acento sobre el rol del Banco Central chileno. (Foto: Reuters)
Varias figuras del Ejecutivo mostraron su preocupación por el aumento del tipo de cambio y pusieron el acento sobre el rol del Banco Central chileno. (Foto: Reuters)

El se reúne este martes y miércoles para estudiar si sube de nuevo la tasa referencial, que ya se encuentra en su mayor valor en 20 años, en un momento crítico, con el en máximos históricos y una inédita inflación.

El país acumula una subida de precios de 12.5% a doce meses, el máximo nivel desde 1994, lo que llevó al ente emisor a elevar en junio 75 puntos la tasa referencial, de 8.25% a 9%, su mayor valor desde el 2001.

A la fuerte inflación se suma la escalada del dólar, que lleva varias jornadas alcanzando máximos históricos, superando puntualmente los 1,000 pesos chilenos y cerrando este lunes por encima de los 970 pesos chilenos, según operadores locales.

En paralelo, el gobierno anunció este lunes nuevas ayudas para 7.5 millones de los 19 millones de habitantes, incluyendo la extensión de un subsidio al empleo y un bono personal de 120,000 pesos (unos US$ 120) para el 60% más vulnerable del país.

Reacciones del gobierno

El pasado miércoles, varias figuras del Ejecutivo mostraron su preocupación por el aumento del tipo de cambio y pusieron el acento sobre el rol del Banco Central.

“Sería oportuno que el Banco Central pudiera compartir su propio diagnóstico sobre lo que está ocurriendo con el tipo de cambio, dado que es la institución que va siguiendo más de cerca los mercados”, dijo el ministro de Hacienda, Mario Marcel.

En la misma línea, la portavoz de gobierno, Camila Vallejo, llamó al organismo a “tomar medidas”, dichos que generaron polémica en el mundo económico y financiero y desataron acusaciones por, supuestamente, no respetar la independencia del ente emisor.

El mandatario Gabriel Boric achacó la semana pasada el alza del dólar a factores externos como el mal desempeño del cobre, principal exportación del país; las perspectivas de recesión en Europa y en Estados Unidos, y la decisión de China de mantener cerradas por la pandemia varias ciudades.

Asimismo, también culpó a la “incertidumbre” política que sobrevuela el país, que está pendiente de votar el 4 de setiembre si sustituye o no su actual Constitución por una nueva.

“Es importante que los diferentes actores políticos demos señales de certidumbre”, agregó el mandatario el mismo día en que arrancó la campaña electoral para el plebiscito de salida.

La inflación ya afectaba fuertemente a Chile en el 2021, cuando cerró con una subida de precios de 7.2% -la más alta en 14 años-.

Según los expertos, las ayudas fiscales para paliar el impacto de la pandemia y los tres retiros anticipados de los fondos de pensiones aprobados por el Congreso, que alcanzan a la fecha más de US$ 44,000 millones de circulante, desataron el consumo.

El Banco Central ha pronosticado un crecimiento económico de entre 1% y 2% del Producto Bruto Interno (PBI) en el 2022, aunque según la misma institución, existe riesgo de recesión para el 2023.