Para formuladores de políticas de América Latina, la expansión cuantitativa siempre fue un lujo que no podían permitirse, no con su historial de hiperinflación y mala gestión.
Ya no. Los bancos centrales de Chile y Colombia ahora están comprando deuda en el mercado secundario para aumentar la liquidez, y es probable que Brasil tome medidas similares pronto. ¿Cuál sería el resultado? Un repunte en los precios de los bonos y una estabilidad que no hay en los mercados de acciones y divisas.
La estrategia consistía en imitar las medidas de la Fed, no solo en recorte de tasas, que ya eran bajas, sino también en la compra de bonos corporativos y una limitación a las ventas de deuda del Tesoro para no competir por la escasa liquidez.
El banco central de Chile lideró, anunciando el 16 de marzo que compraría hasta US$ 4,000 millones en bonos bancarios. Desde entonces se ha expandido hacia otras deudas corporativas. Colombia fue el siguiente y se comprometió a comprar US$ 2,400 millones de deuda emitida por prestamistas locales, que también incluye bonos soberanos TES.
El banco central de Brasil ha tenido un impacto en el mercado a pesar de que el proyecto de ley para permitir la compra de bonos aún está en el Congreso. El extremo largo de la curva DI ha caído casi 60 puntos básicos en las últimas cinco sesiones, mientras que el real se depreció 2.7% durante el mismo período en medio de una intensa volatilidad.
Una disminución en los costos de endeudamiento del Gobierno es el primer paso hacia una reducción en las tasas de interés para las empresas privadas, que son esenciales para revivir la moribunda economía.
Además, la expansión cuantitativa no ha generado un repunte en las expectativas de inflación, ya que la confianza en los bancos centrales sigue siendo alta.
Qué observar:
Estados Unidos se ha convertido en el epicentro mundial de la pandemia de coronavirus, aunque las autoridades estiman que alcanzará su punto máximo en los próximos días a medida que aumenta la presión frente al levantamiento de las medidas de aislamiento social.
Cualquier alivio del cierre en áreas clave, o señal de una segunda ola de casos de virus en Asia o Europa siguen siendo impulsores clave.
Está previsto que el Senado de Brasil vote el 17 de abril sobre la segunda ronda del llamado “presupuesto de guerra”, que flexibiliza los gastos del Gobierno durante la crisis y permite al banco central de Brasil comprar bonos.
Si se aprueba, el texto deberá regresar a la Cámara Baja para dos nuevas rondas de votación, ya que el Senado cambió partes del texto preaprobado.
Uno de los cambios fue hacer que el banco central priorizara los bonos de las pequeñas y medianas empresas en sus compras de activos privados.
Argentina dará detalles el viernes sobre su propuesta de reestructuración a los inversores, a medida que busca guiar sus finanzas hacia un camino sostenible.
En la propuesta se solicita a los inversores que acepten una moratoria de tres años en los pagos y un recorte de 62% del interés adeudado, informó el jueves el ministro de Economía, Martín Guzmán, a periodistas.
México publicará sus datos quincenales del IPC el 23 de abril. La confirmación de la baja inflación es clave para mantener la visión de que Banxico tiene mucho espacio para reducir las tasas en un futuro próximo