El beneficio de las grandes empresas cotizadas españolas que componen el IBEX 35, el selectivo de la bolsa española, se ha resentido en el primer trimestre por el parón económico provocado por la pandemia de COVID-19, y se ha tornado en pérdidas históricas cercanas a los 600 millones de euros.
No obstante, los ingresos conjuntos de las 35 mayores empresas que cotizan en la bolsa española no han marchado tan mal y han caído sólo 8.6%, así como su beneficio bruto de explotación antes de intereses, amortizaciones e impuestos (Ebitda), que ha sido un 14.1% inferior.
Como explica el director de análisis de MG Valores, Nicolás López, esto se debe en parte a que los gastos son fijos y la caída de los ingresos no se puede compensar con un recorte de gastos equivalente, y las pérdidas van aumentando a medida que bajamos en las magnitudes de la cuenta de resultados.
Además, añade el experto, en este primer trimestre este efecto se ha visto amplificado por el tema de las provisiones extraordinarias que han dotado sobre todo los bancos pero también otras compañías, para anticiparse al impacto del parón económico en los próximos meses.
El batacazo ha sido histórico, porque entre enero y marzo del 2019 el beneficio conjunto de las cotizadas del IBEX sumó 9,465.7 millones de euros; y todo apunta a que en los próximos meses los resultados pueden ser aún peores, dado que el confinamiento sólo ha estado vigente la mitad de un mes de los tres primeros meses del 2020.
De las 35 compañías que actualmente componen el IBEX, ocho mejoraron sus beneficios -Acciona, CIE, Colonial, Enagás, Endesa, Grifols, Iberdrola y Viscofán-; otras ocho sufrieron pérdidas - Arcelor, BBVA, Cellnex, Ence, Ferrovial, IAG, Melià y Repsol-, y el resto redujo sus beneficios.
Peor en el segundo trimestre
El impacto de la pandemia de COVID-19 ha sido parcial, explica el analista de XTB Darío García, y cabe esperar que sea mayor en los próximos trimestres, algo que de hecho descuenta ya el mercado.
Todas las proyecciones que se están haciendo ahora van enfocadas a intentar prever lo que puede pasar en los siguientes, añade, pero la muy probable “segunda oleada” del coronavirus puede frustrar la previsión de que pudiera haber “mejoras respecto a los confinamientos y al desarrollo de determinadas actividades”.
El director de Inversiones de ATL Capital, Ignacio Cantos, confirma que no va a haber esa “nueva normalidad hasta prácticamente el mes de julio, así que con total seguridad los resultados del segundo trimestre van a ser peores”.
Se esperan caídas de entre 40% y 50% de ventas e incluso que muchas de las empresas entren en negativo, añade: “Con muy honrosas excepciones”, señala, va a ser un trimestre muy complicado para la mayor parte de las empresas.
Excluidas aquellas cuyo año fiscal es distinto -Inditex y Siemens Gamesa-, si se examinan las cuentas con atención las desorbitadas pérdidas acumuladas durante el trimestre -587 millones de euros- se deben sobre todo a tres compañías: BBVA, IAG y ArcelorMittal.
Bancos
BBVA destinó 1,433 millones a provisiones para el coronavirus, a las que tuvo que añadir 2,082 millones para cubrir la pérdida de valor de su filial en Estados Unidos, lo que le ocasionó unas pérdidas de 1,792 millones de euros en el trimestre.
El resto de entidades financieras dotó también abundantes provisiones ante COVID-19, y en conjunto, Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Sabadell y Bankinter registraron una merma de beneficios de 1,053 millones de euros, tras dotar cerca de 3,800 millones a provisiones por la pandemia.
Ignacio Cantos prevé que las entidades sigan aumentando sus provisiones en lo que resta de año, ya que “para que nos hagamos una idea, el Santander ha provisionado sólo 17% de todo lo que dotó en el 2019, siendo un año normal”.
Además, habrá que tener en cuenta la morosidad, ya que muchas empresas entrarán en mora y los bancos tendrán que hacer más provisiones.
Las mayores pérdidas
El grupo aéreo International Airlines Group (IAG) -formado por British Airways (BA), Iberia, Vueling, Aer Lingus y Level- acusó el desplome de la actividad tras las estrictas medidas de confinamiento y el cierre de fronteras y sus pérdidas alcanzaron 1,683 millones de euros.
Aunque el grupo obtuvo unos ingresos de 4,585 millones de euros en los tres primeros meses del año, un 14.5% menos que un año antes, y los resultados de las operaciones en enero y febrero fueron similares a los del 2019, marzo se vio “gravemente afectado” por las restricciones a los viajes, según explicó el consejero delegado, Willie Walsh, en la presentación de sus cuentas.
El ejecutivo no dudó en admitir que su segundo trimestre será “considerablemente peor” que el primero, por lo que no facilitará las previsiones de beneficios para todo el 2020.
La otra compañía con números rojos de más de mil millones es ArcelorMittal, que perdió US$ 1,120 millones (1,038 millones de euros), frente a los US$ 441 millones (408 millones de euros) que había ganado en el mismo período del 2019.
Su Ebitda alcanzó 896 millones de euros, un 41.5% por debajo de los 1,530 millones de hace un año, y su previsión para el segundo trimestre se sitúa entre 370 millones y 556 millones de euros.
No obstante, su consejero delegado, Lakshmi N. Mittal, cree que el acero y la construcción parecen dos de los sectores que saldrán más rápido del parón y antes podrán reactivarse, y ya hay signos de que “los clientes reinician la producción”.
Grandes valores
También ha estado muy condicionada por la pandemia la cuenta de resultados de Repsol, que perdió 487 millones de euros frente a los 608 millones que ganó en el primer trimestre del 2019, debido a la depreciación de sus inventarios en 790 millones por la caída de los precios del crudo y del gas, así como por el desplome de la demanda provocado por el COVID-19.
En cuanto a otros pesos pesados del IBEX, Telefónica redujo su beneficio en más de la mitad, un 56.2%, hasta 406 millones de euros, con un descenso de los ingresos de 5.1% respecto a un año antes, al facturar 11,366 millones de euros, una caída que la operadora achaca de forma “limitada” a la pandemia de coronavirus.
Iberdrola, por su parte, obtuvo un beneficio neto de 1,257 millones de euros, 30.4% más que en el mismo periodo del 2019, gracias a la venta de 8% que tenía en Siemens Gamesa.