Es una frase que no se escucha todos los días de los titanes de Wall Street: quizás deberíamos pagar impuestos más altos.
La pandemia ha hecho que nombres reconocidos como Larry Fink y Lloyd Blankfein expresen en voz alta que podría ser necesario, a medida que se descarrila la economía. Algunos incluso piden que los ricos paguen más.
Los multimillonarios financieros se beneficiaron más que cualquier persona de los recortes de impuestos masivos del presidente Donald Trump, su logro legislativo característico. Ahora están contemplando el final de esa era, lo que resalta la gravedad del momento.
Justo esta semana, Ray Dalio, el hombre detrás del mayor fondo de cobertura, dijo a los clientes de la banca privada de JPMorgan Chase & Co. que esperen tasas impositivas más altas sin importar quién gane la carrera de noviembre por la Casa Blanca. El creciente dolor fiscal en todo el país hace que las matemáticas sean innegables para líderes como Fink, quien dirige la mayor administradora de activos del mundo, BlackRock Inc., y Blankfein, quien dirigió Goldman Sachs Group Inc. durante la última crisis financiera.
“Los impuestos tienen que subir, y subirán en el extremo superior”, dijo el veterano de los fondos de cobertura Leon Cooperman en una entrevista. “Tenemos que lidiar con nuestra situación fiscal y dejar de endeudar a nuestros hijos”. Dijo que estaría dispuesto a pagar la mitad de sus ingresos al gobierno.
Nadie espera que Trump revierta inmediatamente los recortes de impuestos que firmó cuando la economía estaba en auge, particularmente con su reelección en juego. De hecho, incluso mientras desaparecen millones de empleos, el presidente ha hablado de reducir los impuestos sobre la nómina y reducir la tasa de ganancias de capital, otra medida que beneficiaría desproporcionadamente a los ricos.
Pero dentro de las oficinas ejecutivas, el debate ya pasó de si aumentar las tasas impositivas a una cuestión de cuánto subirán cuando la economía comience a recuperarse.
Casi US$3 billones en fondos federales de rescate de emergencia aún no detienen el dolor de un brote mortal que congela industrias enteras y obliga a más de 33 millones de estadounidenses a buscar beneficios de desempleo.
Fink predijo esta semana que la tasa corporativa podría aumentar en un tercio el año próximo. Blankfein dijo que la clara necesidad de recaudar más ingresos significa que los impuestos corporativos tendrán que aumentar. Su pregunta es hasta qué punto pueden subir las tasas antes de que se vuelva contraproducente.
“Aumentar demasiado los impuestos obstaculizará la recuperación y, particularmente para los estados con altos impuestos, incentivará a personas y compañías a irse”, dijo Blankfein en un correo electrónico.
Los críticos de los recortes de impuestos se han quejado durante mucho tiempo de que las compañías gastaron el dinero extra en la compra de sus propias acciones para aumentar los precios, en lugar de invertir el dinero en desarrollar sus negocios y agregar empleos. Incluso Trump se ha quejado de cómo se puso a trabajar el dinero.
Algunos de los estadounidenses ricos que anticipan impuestos más altos están en condiciones de hacer algo al respecto. El multimillonario JB Pritzker, gobernador de Illinois y heredero de la fortuna Hyatt, está apuntando a los ricos en su esfuerzo por recaudar más ingresos para su estado con problemas de liquidez. El veterano de Goldman Sachs Phil Murphy, ahora gobernador de Nueva Jersey y otro demócrata, está tratando de impulsar el impuesto a los millonarios, vendiéndolo como una cuestión de justicia.
No todos en Wall Street estarían contentos con pagar más. Un alto ejecutivo de una empresa global de gestión de activos dijo que estaba tan perturbado por un plan que sonaba alrededor de Albany para aumentar los impuestos a los neoyorquinos más ricos que llamó a un influyente senador estatal para quejarse.
Dalio, el fundador de Bridgewater Associates LP, predijo en 2017 que los recortes de impuestos de Trump solo proporcionarían un “impulso menor a corto plazo” a la economía. Ahora cree que habrá que revertirlos para ayudar a pagar la respuesta a la pandemia. Sus declaraciones de esta semana fueron descritas por una persona que escuchó los comentarios. Un portavoz de Bridgewater declinó hacer comentarios.