El gobierno del presidente Joe Biden ha extendido este lunes la licencia que autoriza algunas transacciones de exportación de gas licuado de petróleo a Venezuela, informó el Departamento del Tesoro estadounidense.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), dependiente de este departamento, permitirá “todas las transacciones relacionadas con la exportación o reexportación, directa o indirecta de gas liquidificado de petróleo a Venezuela”, por el gobierno de Venezuela, la compañía estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) o cualquier entidad que tenga alguna participación en esta empresa, señala en un comunicado.
Al igual que en 2023, no permite el pago en especie de petróleo o productos derivados ni transacciones que involucren a personas bloqueadas. Washington aplica una batería de sanciones a Venezuela tras la reelección en 2018 de Nicolás Maduro, que considera “fraudulenta”. Estas medidas incluyen, desde 2019, la prohibición de comercializar petróleo venezolano.
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La licencia 40C entra en vigor este lunes durante un año y sustituye a una emitida el 10 de julio de 2023.
El Gas Licuado de Petróleo (GLP), una mezcla de gases compuesta sobre todo por butano y propano, es importante para Venezuela, otrora potencia energética que sufre un déficit de combustible en algunas zonas del país.
El gobierno de Maduro asegura que Venezuela y Estados Unidos acordaron “mejorar las relaciones” bilaterales tras la reanudación de un proceso de diálogo la semana pasada, cuando faltan tres semanas para las elecciones presidenciales en el país caribeño.
Washington es muy crítico con cómo se desarrolla el proceso electoral y los obstáculos que la oposición encara para participar en él. La Casa Blanca ha criticado además la detención de opositores en los últimos seis meses (46, según la oenegé Acceso a la Justicia) y la decisión de retirar la invitación a la Unión Europea para observar el proceso electoral de las presidenciales.