Un grupo de diputados chilenos anunció este viernes que presentará un proyecto de reforma constitucional para aplicar un arancel del 50% durante tres años al acero chino con el objetivo de evitar el cierre de Huachipato, la principal productora de acero del país, que anunció la suspensión indefinida de sus operaciones ante la imposibilidad de competir contra el gigante asiático.
Concretamente, la iniciativa impulsada por congresistas de la región del Biobío, donde se ubica la faena de Huachipato, establece “un plazo transitorio de tres años para aplicar un arancel específico a productos desde China que contengan acero o que compitan con acero en desventaja para Chile”, señaló la diputada Joanna Pérez.
“Necesitamos que se puedan revisar estos antecedentes, pero también desde la Cámara de Diputados vamos a ejercer todo tipo de acciones para hacer ver que esto es insuficiente y visibilizar nuestra problemática regional por la posible pérdida de empleo”, agregó la parlamentaria.
El directorio de la siderúrgica anunció el miércoles que suspende sus operaciones “por tiempo indefinido” ante la crítica situación que atraviesa desde hace más de una década y tras considerar insuficientes las medidas antidumping contra el acero procedente de China, país con quien Chile tiene un tratado de libre comercio desde 2006.
Ubicada en la ciudad sureña de Talcahuano, 500 kilómetros al sur de la capital, Huachipato tomó la decisión un día después de que la Comisión Antidistorsiones, una institución independiente que asesora a la Presidencia chilena, recomendara aplicar un impuesto promedio del 15,3 % a tres empresas chinas que importan bolas de acero.
Para la compañía, que genera cerca de 20,000 empleos directos e indirectos y registró pérdidas por US$ 385.5 millones en 2023, la cifra es “insuficiente” y no alcanza a solucionar las distorsiones que está produciendo el acero chino, que es un 40% más barato que el chileno, según sus cálculos.
“Estamos de luto”, dijo a los medios el presidente del Sindicato N°1 de Trabajadores de Huachipato, Héctor Medina, quien aseguró que las sobretasas tienen que ser como mínimo del 25% para las barras de acero y del 33% para las bolas de acero para poder competir en igualdad de condiciones.
En las últimas dos décadas, China ha pasado de ser un gran importador de acero a uno de los principales productores del mundo, pasando de producir el 15% del acero del mundo en el 2000 al 54% en 2023, según Alacero, la patronal que reúne a las grandes siderúrgicas latinoamericanas.
Pese a ser una compañía relativamente pequeña en el mercado mundial del acero, con una producción de un millón de toneladas anuales, la situación de Huachipato ha encendido las alarmas en la región, a donde llega parte del acero que el gigante asiático no pude colocar en su mercado debido a la desaceleración de su economía.
La Unión Europea y más de medio centenar de países, como Estados Unidos, México, Canadá, Brasil e India, han aplicado medidas antidumping en los últimos años para equilibrar las distorsiones provocadas en los mercados locales por el acero chino.