El desminado de todo el territorio ucraniano tras la invasión rusa llevará entre cinco y diez años, aseguró Oleh Bondar, jefe del Departamento de Desminado Humanitario del Servicio Estatal de Emergencia de Ucrania, informó la agencia local Ucrania-Ukrinform.
“Según la experiencia internacional, la retirada de minas puede llevar de cinco a diez años”, precisó Bondar, para quien una de las mayores consecuencias negativas de la invasión rusa de Ucrania es la contaminación masiva de su territorio y localidades pobladas por explosivos, incluidos los prohibidos por las convenciones internacionales.
Bondar aclaró que el Ejército ruso utilizó sistemas de minas controladas a distancia, colocó campos de minas en localidades pobladas y dejó una gran cantidad de artefactos explosivos.
Estos últimos son, a su juicio, especialmente peligrosos y fueron colocados de una forma concreta para que representen una amenaza y un peligro mortal para los civiles.
“Estas minas y municiones se han descubierto en las regiones de Kiev, Chernigov, Járkov, Sumy, Mykolaiv, Zaporiyia, Dnipro, Donetsk y Lugansk”, agregó, lo que representa gran parte del territorio ucraniano.
El número total de minas, municiones de racimo y dispositivos explosivos especialmente instalados representa aproximadamente el 10% de todos los artefactos explosivos detectados y neutralizados hasta ahora.
Según el experto, después de que las Fuerzas Armadas de Ucrania liberaran pueblos y aldeas, se están tomando medidas prioritarias sobre desminado, que incluyen inspecciones de localidades, carreteras y edificios, trabajo de equipos de emergencia en líneas eléctricas, gas y tuberías de agua.
“Actualmente, la implementación de estas medidas nos ha permitido iniciar un proceso escalonado de inspección y desminado de terrenos agrícolas. Hacemos todo lo posible para que las empresas agrícolas puedan realizar la campaña de siembra de primavera”, insistió Bondar.