La Federación Europea de Industrias y Asociaciones Farmacéuticas (EFPIA) aseguró que las existencias de medicinas y las cadencias de producción se están manteniendo, por lo que no hay riesgo de penuria de medicamentos salvo que la situación de crisis sanitaria dure “varios meses”.
“La situación se mantiene fluida, una pandemia de esta escala contiene una incertidumbre inevitable, pero en este momento los miembros de EFPIA no anticipan impactos en sus cadenas de suministros salvo que la interrupción debido al brote de Covid-19 se mantenga durante varios meses”, indicó la patronal farmacéutica en un comunicado.
Actualmente “los niveles de existencias de medicinas y las cadencias de producción se están manteniendo”,agregó EFPIA, que en los últimos días ha estado en contacto con los comisarios europeos de Sanidad, Stella Kyriakides; de Industria, Thierry Breton, y de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, y con representantes de las cadenas de suministros de medicinas y equipos médicos.
No obstante, la patronal farmacéutica señala que se ha encontrado con problemas en los últimos días, como la cada vez mayor dificultad para organizar en Europa envíos logísticos de medicamentos, vacunas y productos semi-terminados o presiones de demanda de algunos tratamientos utilizados para mitigar los síntomas del coronavirus.
“Estas presiones pueden verse acuciadas por las decisiones unilaterales de los Estados miembros. Además, puede haber desafíos de suministro como resultado de la incapacidad de gestionar la compra en farmacia de medicamentos recetados ‘en pánico’”, señala EFPIA, que también apunta a la reducción del tráfico aéreo como otro de los obstáculos.
“Abordar este problema requiere coordinación entre la Comisión Europea, los gobiernos, las compañías aéreas, los operadores logísticos y la industria para garantizar que podamos continuar produciendo y enviando medicamentos a donde se necesiten”, avisa la patronal farmacéutica europea.
La industria farmacéutica, agrega EFPIA, está centrada en la búsqueda de nuevas vacunas, diagnósticos y tratamientos para ayudar en la lucha contra el COVID-19; en apoyar a los gobiernos y a los sistemas de salud sobre el terreno, y en garantizar el suministro de medicamentos a los pacientes que los necesitan.