Santiago. Los ministros de Obras Públicas, Alfredo Moreno, y de Energía, Juan Carlos Jobet, se convirtieron en los primeros miembros del gabinete del presidente de Sebastián Piñera en contagiarse de coronavirus, en medio del preocupante incremento de casos y muertes por la pandemia en Chile.
“He sido notificado que el examen de COVID-19 que me realicé hace unos días dio positivo, afortunadamente no he tenido síntomas hasta ahora”, anunció Moreno, el primero de los ministros en comunicar el contagio, en su cuenta de Twitter.
El ministro de 63 años había informado el viernes que, tras hacerse el test, decidió iniciar un aislamiento preventivo luego de enterarse de que uno de sus colaborares había dado positivo a la COVID-19.
En tanto, el ministro Jobet dio positivo por coronavirus, luego que el sábado inició una cuarentena preventiva “al experimentar síntomas leves, que podían estar asociados a la enfermedad”, indicó un comunicado del Ministerio de Energía.
Jobet, de 44 años, “no ha tenido contacto directo con el Presidente Sebastián Piñera ni con otros miembros del gabinete en los últimos días”, agregó la nota, en la que no especificó cómo se contagió.
El anuncio se produce el mismo día en que Chile registró un récord de contagios, con 4.895 nuevos infectados y 43 fallecidos en las últimas 24 horas, lo que elevó el total a 73.997 contagios y 761 muertos desde el primer caso reportado el 3 de marzo.
En tanto, el ministro de Bienes Nacionales, Julio Isamit, se mantiene en aislamiento preventivo por contacto con un infectado, pese a haber dado negativo al examen de COVID-19.
Los ministros de Hacienda, Ignacio Briones, y de Economía, Lucas Palacios, que habían estado expuestos a contagios en sus entornos, también dieron negativo y ya retornaron a sus funciones después de estar en confinamiento.
Durante la jornada también se confirmó el contagio de la diputada oficialista Marcela Sabat, quien se convirtió en la primera integrante de la Cámara Baja del Congreso en contraer el virus.
Sabat se contagió tras mantener contacto con uno de los tres senadores que la semana pasada se infectaron y se encuentran aislados, y cuyos casos provocaron el cierre del Senado y la organización de las sesiones por videoconferencia.
El incremento de casos ha encendido las alarmas en los hospitales chilenos, que tienen ocupadas un 85% de sus camas de las unidades de cuidados intensivos.
Santiago se mantiene como el mayor foco de la pandemia en Chile, con el 90% de los casos en todo el país. La capital chilena vive una cuarentena total por segunda semana, mientras que en otras tres regiones -Tarapacá y Antofagasta (norte), y La Araucanía (sur)- los confinamientos son selectivos.